Una niña falleció en el municipio de Tototlán, en Jalisco, tras ingerir una galleta envenenada que había sido colocada para herir o acabar con la vida de un perro; una de sus amigas que jugaba con ella permanece delicada luego de probarla.
Heidy Valeria, de solo dos años de edad, decidió jugar afuera de su casa con una de sus vecinas, Noemi, de seis años, y cuando encontraron la galleta decidieron compartirla, sin saber que fue puesta de manera intencional por alguno de los vecinos para lastimar a uno o varios “lomitos” callejeros.
Luego de ponerse grave de salud, fue atendida por elementos de Protección Civil del municipio y trasladada a la Unidad Municipal de Protección Civil; no obstante, las labores de reanimación y los protocolos de intoxicación no resultaron y perdió la vida.
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Por su parte, su amiga Noemi fue trasladada al Hospital Civil, con un estado de salud delicado, según los primeros reportes tras comer la galleta envenenada.
De acuerdo con los registros de la Comisaría de Seguridad Pública y Tránsito de Tototlán, no existen casos de envenenamiento de perros en la zona de lo ocurrido, pero el caso ya fue atraído por la Fiscalía General del Estado de Jalisco (FGEJ), instancia que ya puso en marcha las investigaciones correspondientes.
Juan Carlos Velázquez, el alcalde de Tototlán, aseguró que ha dado seguimiento al caso y se mantiene en contacto con las familias de las menores afectadas por el accidente; además, busca que se haga justicia sobre el acontecimiento.
