BRUSELAS, 8 (EUROPA PRESS)
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha continuado este martes con una llamada a la primera ministra danesa, Mette Fredriksen, la ronda de contactos entre aliados frente a la crisis en Ucrania, en un momento en el que gana espacio los esfuerzos diplomáticos ante Rusia.
«Buena llamada con Frediksen para discutir la concentración militar en torno a Ucrania y las implicaciones para la seguridad europea», ha indicado el responsable político de la OTAN en un mensaje en Twitter, tras un contacto en el que ha reiterado la exigencia a Moscú de «desescalar y elegir el camino de la paz». «La OTAN siempre protegerá a sus aliados, a la vez que está lista para conversar con Rusia», ha señalado.
El político noruego ha insistido en sus últimas apariciones públicas en la oferta a Rusia para discutir asuntos de seguridad en Europa, como puso por escrito la Alianza Atlántica en la respuesta enviada al Kremlin a finales de enero. Aunque asegura que no se comprometerán principios básicos como el respeto a la soberanía e integridad territorial de los países, así como la libre elección de sus alianzas.
Dinamarca fue junto a España uno de los primeros aliados que ofrecieron su capacidad militar en el marco del apoyo de la OTAN a Ucrania. En medio del pulso con Moscú, Copenhague puso a disposición cuatro cazas de combate adicionales para reforzar la misión de vigilancia aérea de la Alianza Atlántica en el mar Báltico.
Los últimos días Stoltenberg ha redoblado los contactos con los miembros de la alianza militar para garantizar un frente común ante la amenaza rusa, que mantiene 100.000 tropas y unidades logísticas a las puertas de Ucrania y ha desplegado 30.000 fuerzas en Bielorrusia para realizar maniobras conjuntas.
Solo en los últimos ocho días, ha mantenido contactos con presidentes como Recep Tayyip Erdogan, de Turquía; Emmanuel Macron, de Francia; o los primeros ministros de Países Bajos, Mart Rutte; Bulgaria, Kiril Petkov; y Hungría, Viktor Orban; éste último llegó en plena visita del mandatario magiar a Moscú para reunirse con Vladimir Putin.
Además, se reunió este martes con el presidente polaco, Andrezj Duda, en la sede de la OTAN, ante el que confirmó que la organización baraja un aumento «a largo plazo» de sus fuerzas en el flanco oriental, una de las peticiones centrales de los países del este de Europa, que representan la línea dura en el pulso con Moscú.
Este despliegue diplomático se completa con los contactos regulares que mantiene el jefe de la OTAN con el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, y el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, en un claro intento de evitar cualquier fisura en la coordinación trasatlántica. Stoltenberg también ha llamado los últimos días a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, cuyo gabinete está inmerso en el diseño de las sanciones europeas para responder una posible agresión rusa.