LIMA (AP) — El presidente peruano Pedro Castillo rechazó el domingo haber cometido “actos ilícitos” difundidos por la prensa en base a supuestas declaraciones de una aspirante a colaboradora eficaz de la fiscalía, quien afirma que el mandatario integraría un clan criminal que obtiene dinero de obras públicas.
En un breve mensaje a la nación, Castillo cuestionó que las acusaciones de la empresaria y cabildera Karelim López —aspirante a convertirse en colaboradora eficaz de una fiscalía de lavado de activos— “se debata publicamente” debido a que son “materia de investigación”.
Los diarios El Comercio y La República publicaron que López le dijo a una fiscal —que la investiga por lavado de activos y que ha congelado sus cuentas bancarias— que Castillo integra supustamente una red corrupta junto al ministro de Transportes, Juan Silva, cinco legisladores, familiares del mandatario y el brazo local de la constructora estatal China Civil Engineering Construction Corporation.
López añadió, según los diarios, que un supuesto primo de Omar Tello —coordinador jefe de las fiscalías anticorrupción, donde ella también es investigada adicionalmente por los presuntos delitos de tráfico de influencias y colusión— había indicado que las indagaciones anticorrupción no iban a prosperar. Tello dijo a The Associated Press que rechazaba “todo acercamiento con el presidente y su entorno”, incluyendo a López.
Tello añadió que en 2021 realizaron 1.212 condenas por corrupción, así como más de 400 detenciones preliminares.
“La corrupción es un monstruo de muchos tentáculos, hay investigados de la esfera política y con mucho poder económico que están muy asustados”, dijo el fiscal.
López es investigada por las fiscalías anticorrupción porque dos empresas locales ligadas a la empresaria ganaron dos licitaciones para construir un puente y suministrar biodiesel.
Según la ley, las declaraciones de la empresaria López, de 41 años, deben ser confirmadas con pruebas. El sábado, Castillo dijo en su cuenta de Twitter que “circula en la prensa monopólica una serie de especulaciones que tienen como objetivo atentar contra la democracia. Los mismos que conspiraron contra los anteriores mandatarios quieren hacerlo ahora contra el Gobierno del pueblo”.
La AP solicitó comentarios a la estatal China Civil Engineering Construction Corporation, sin obtenerlos al momento.
La difusión en los medios locales de las acusaciones contra el presidente provocaron que Castillo afirme que esas declaraciones reservadas de la empresaria López “evidencia que la fiscalía estaría formando parte de un complot para desestabilizar al gobierno”.
El Ministerio Público indicó que la fiscal general Zoraida Avalos se pronunciará por la noche.
El presidente añadió que «hay un sector minoritario que nunca aceptará nuestro gobierno popular y democrático. Hoy buscan vacarnos para no solucionar los grandes problemas que tiene nuestra patria”.
Sin mencionarlo, Castillo se refería a la oposición de grupos políticos en el Parlamento que apenas en diciembre buscaron destituirlo a cuatro meses de iniciada su gestión por “incapacidad moral permanente”, un argumento que provocó la destitución en 2020 del entonces mandatario Martín Vizcarra y en 2000 de Alberto Fujimori (1990-2000), sentenciado luego por corrupción y asesinato.
Pese a que su gobierno tampoco quiso ser reconocido al inicio por parte de la oposición, tras vencer en las elecciones presidenciales en 2021, el mandatario ha sido criticado de forma unánime por su recurrente descuido en escoger a piezas claves de su gobierno. Ha tenido cuatro gabinetes ministeriales en seis meses y su exministra Mirtha Vásquez, abogada progresista que renunció en enero, ha señalado que Castillo no ha tomado “respuestas contundentes” en la lucha anticorrupción.
El exministro del Interior Avelino Guillén, un respetado exfiscal que logró la condena del expresidente Fujimori en 2009, también dijo en enero tras su renuncia que Castillo no lo apoyó cuando le pidió destituir al jefe de la policía quien buscaba jubilar agentes valiosos y debilitar una unidad que combate el crimen organizado que actúa bajo la fachada de partidos políticos.
La gestión de Castillo se ha debilitado luego que investigaciones anticorrupción del Ministerio Público han tocado las puertas del palacio presidencial. Los fiscales anticorrupción han ingresado seis veces en los últimos meses al epicentro del poder en Perú e incluso han hallado 20.000 dólares en un baño de un exsecretario presidencial quien está bajo investigación.
La aprobación presidencial cayó 13 puntos en febrero desde el inicio de su gestión hasta 25%, mientras su impopularidad subió a 69% y 6% no precisa, según un sondeo de Ipsos Perú.
En apenas más de medio año de gestión de Castillo, la empresaria López pasó de ser cercana del presidente, de visitarlo más de un vez, e incluso de organizar una pomposa fiesta a la hija menor del mandatario en el palacio presidencial, a convertirse en colaboradora eficaz.
Perú es un país donde casi todos sus expresidentes vivos están manchados o investigados por corrupción, arrastrando al descrédito a gran parte de su clase política. Una encuesta nacional del Instituto de Estudios Peruanos publicada el domingo por el diario La República indicó que 48% quisiera que haya elecciones para escoger un nuevo presidente y 130 legisladores.
El congreso anunció en la víspera que el lunes los representantes de los partidos políticos se reunirán para conversar luego de las declaraciones de la empresaria. Algunos partidos han afirmado que presentarán pedidos para destituir al mandatario, otros se han mostrado cautos.
Luego de su mensaje, Castillo se dirigió a una isla frente a Lima donde viven miles de aves marinas que por siglos defecan excrementos que sirven para fertilizar la agricultura y que durante el siglo XIX produjeron inmensas cantidades de dinero público que se esfumaron a causa de la corrupción. Castillo no habló sobre las acusaciones y no hubo acceso a la prensa.