MADRID (AP) — Cientos de migrantes saltaron las cercas que separan el pequeño enclave español de Melilla, en el norte de África, de Marruecos, dijeron las autoridades españolas el miércoles.
La delegada del gobierno en Melilla, Sabrina Moh, se mostró sorprendida por que más de 2.000 personas hubiesen intentado cruzar en uno de los intentos más numerosos registrado hasta la fecha.
Las autoridades desconocen cuántas personas habían entrado realmente en la ciudad y si había heridos, afirmó Moh en declaraciones a la emisora de radio Cadena COPE.
“Todo sucedió muy rápido», añadió.
La radio publicó en internet videos de hombres jubilosos celebrando su entrada al territorio, algunos de ellos cubiertos de sangre, mientras se dirigían a un centro de migrantes de Melilla, que tiene capacidad para 480 personas.
Los migrantes que huyen de la pobreza y la violencia, muchos de ellos procedentes del África subsahariana, suelen esperar durante semanas, o incluso meses, en las inmediaciones de Melilla y de Ceuta, el otro enclave español en la costa norteafricana, a la espera de una oportunidad para ingresar a suelo europeo.
Desde allí, suelen intentar continuar su viaje al territorio continental y a otras zonas de Europa.
