Hong Kong lidera la tasa de muertes ‘per capita’ por coronavirus a nivel mundial
MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
La ONG Human Rights Watch (HRW) ha emplazado a las autoridades de Hong Kong a poner en libertad a los «cientos» de dirigentes y activistas prodemocrácticos ante el creciente riesgo por el aumento de los contagios por coronavirus.
«Las autoridades de Hong Kong están haciendo que una situación de por sí mala sea aún peor al encarcelar a activistas democráticos en instalaciones carcelarias en medio de un pico de COVID-19», ha explicado la investigadora de HRW para China Maya Wang.
Aproximadamente 1.000 de los 7.538 presos de Hong Kong han dado positivo por coronavirus en las dos últimas semanas, según el Departamento de Servicios Correccionales hongkonés. Por ello, HRW señala que la COVID-19 «supone un mayor riesgo para personas que viven cerca de otras», un riesgo «particularmente grave» en instalaciones «masificadas, con mala ventilación y sin las instalaciones sanitarias adecuadas».
Hong Kong lidera actualmente la tasa de muertes por COVID-19 ‘per capita’ principalmente debido a la baja tasa de vacunación de las personas mayores.
En esta situación, el Departamento de Servicios Correccionales suspendió las visitas de familiares el 4 de febrero y se han restringido las visitas de abogados, que se han suspendido desde este lunes. Así, las familias solo pueden obtener información de los presos a través de las autoridades penitenciarias.
Por todo ello, HRW pide la «liberación» de todos los presos «encarcelados erróneamente», con prioridad para los menores de edad, las personas mayores y las personas vulnerables por su condición sanitaria.
PRESOS DE AVANZADA EDAD
El riesgo de la enfermedad es aún mayor para las personas de edad avanzada y entre la población no vacunada, mayoritaria entre la población carcelaria. Solo el 36 por ciento de los presos habían recibido la primera dosis a finales de enero, muy por debajo del 71 por ciento del conjunto de la población.
En particular, HRW y el Consejo Democracia de Hong Kong destacan el caso del sindicalista Lee Cheuk Yan, de 65 años de edad, y del dirigente prodemocrático Albert Ho, de 70 años, que han dado positivo por COVID-19, según han informado los medios de comunicación hongkoneses.
Otro veterano activista, Koo Sze Yiu, de 75 años, padece un cáncer rectal de fase 4 y también se informó de que dio positivo por coronavirus, aunque más tarde esta información fue desmentida. Koo fue detenido el 4 de febrero, justo antes del inicio de los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín, contra los que había anunciado protestas.
Fue acusado de «incitar a la subversión» y luego se le sumó el cargo de sedición. No se le ha visto desde el 5 de febrero y no ha comparecido en ningún tribunal, pese a que estaba prevista su presencia en la sesión del 3 de marzo. Su «condición física inadecuada» fue la causa planteada por la Fiscalía.
El 5 de febrero Koo reprochó a las autoridades que «los Derechos Humanos están por encima del régimen». «La gente está por encima del país. No me declaro culpable», remachó.