NICOSIA, Chipre (AP) — El presidente de Chipre prometió el lunes hacer que las condiciones en un atestado campamento para migrantes sean “más humanas” tras críticas de que las condiciones de vida para más de 350 menores no acompañados eran inadecuadas.
El presidente Nicos Anastasiades dijo después de una breve visita al campo Pournara —en las afueras de Nicosia— que cualquier “deficiencia” en el campamento que surja como resultado de un flujo continuo de migrantes será “abordada como corresponde”.
Anastasiades dijo que se prevén dificultades cuando casi 5% de la población de la isla dividida por etnias son personas en busca de asilo. Agregó que Chipre sigue en el primer puesto de número de solicitudes de asilo per cápita entre los miembros de la Unión Europea.
El presidente agregó que un “gran número de migrantes” ya ha sido reubicado y que una reunión del lunes entre ministros y altos funcionarios públicos concluirá con opciones para encontrar alojamiento alternativo para los menores no acompañados.
La semana pasada, el comisionado de derechos infantiles Despo Michalidou dijo que las condiciones para los menores no acompañados en el campamento eran “miserables”, en parte debido a la comida de mala calidad y la falta de instalaciones sanitarias.
Anastasiades negó que la comida fuera inadecuada, pero señaló la falta de una bebida caliente en el desayuno, lo que calificó de una “omisión seria”.
Chipre fue dividida a lo largo de la frontera étnica en 1974 cuando Turquía invadió tras un golpe de Estado organizado por partidarios de la unión con Grecia. El gobierno chipriota acusa a Ankara y las autoridades separatistas turcas chipriotas en el norte de organizar la llegada de migrantes de África subsahariana, Asia y otras partes para buscar asilo en la isla.
Funcionarios chipriotas afirman que aproximadamente 85% de todos los solicitantes de asilo llegan primero al norte y cruzan la permeable zona de neutral controlada por Naciones Unidas para buscar asilo en el sur, en donde se ubica el gobierno con reconocimiento internacional.
La Unión Europea ha prometido apoyo económico y material para el gobierno chipriota.