MADISON, Wisconsin, EE.UU. (AP) — El gobernador demócrata de Wisconsin le dijo a la Corte Suprema del estado el jueves que debería permitirle presentar evidencia adicional para defender su mapa de límites distritales legislativos que la Corte Suprema federal rechazó, argumentando que es mejor que el presentado por la Legislatura, donde los republicanos son mayoría.
Por su parte, la Legislatura le pidió a la corte estatal ignorar al gobernador Tony Evers y, en cambio, adoptar el mapa trazado por los republicanos.
El tribunal estatal aún tiene que decir cómo procederá después de que el fallo de la Corte Suprema de Estados Unidos el miércoles dejó a Wisconsin sin nuevos límites legislativos a tres semanas de que los candidatos comiencen a circular los documentos para ser incluidos en la boleta electoral.
Evers y la Legislatura enviaron sus cartas por separado a la corte estatal.
Evers también le solicitó a la corte estatal que, en caso de no adoptar su mapa, considere hacer un cambio para reducir el número de distritos de la Asamblea de mayoría negra de siete a seis. El mapa de la Legislatura tenía cinco distritos de mayoría negra en Milwaukee.
La Corte Suprema federal dijo en su fallo el miércoles que la Corte Suprema estatal no consideró si una “alternativa neutral en cuanto a la raza que no agregara un séptimo distrito de mayoría negra negaría a los votantes negros la igualdad de oportunidades políticas”.
El tribunal de la nación también dijo que la corte estatal era libre de tomar evidencia adicional para reconsiderar el mapa de Evers, y eso es lo que el gobernador le pidió a la corte el jueves. Quiere que el tribunal estatal permita la presentación de pruebas adicionales hasta el 1 de abril.
Se espera que el tribunal actúe rápidamente, dado que los candidatos a la Legislatura pueden comenzar a circular los documentos el 15 de abril para estar en la boleta electoral este otoño.
Hasta que la corte adopte los nuevos mapas, no hay mapas para las elecciones legislativas de otoño. Eso significa que un candidato corre el riesgo de reunir firmas de votantes que pueden terminar viviendo en el distrito por el que se postulan, lo que los invalidaría.
La redistribución de distritos busca volver a trazar los límites políticos del estado en función del último censo, que muestra cómo han cambiado las poblaciones en los vecindarios, ciudades y condados desde 2010. Los que elaboran dichos mapas pueden crear una ventaja para su partido político en elecciones futuras al agrupar a los votantes de los oponentes en unos pocos distritos o repartirlos entre distritos múltiples.