Entre los principales objetivos figuran la lucha contra Al Shabaab y el gradual traspaso de competencias de seguridad
MADRID, 1 (EUROPA PRESS)
El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ha dado su respaldo unánime a la reconfiguración de la Misión de la Unión Africana en Somalia (AMISOM), que centra sus esfuerzos en la lucha contra el grupo terrorista Al Shabaab, lo que supone la creación de la Misión de Transición de la Unión Africana en Somalia (ATMIS).
La resolución respalda la decisión adoptada previamente por la UA para reconfigurar la AMISOM y dar a luz la nueva misión, que contará con un mandato inicial de doce meses y contempla además un traspaso gradual de las responsabilidad de seguridad a las autoridades del país africano.
Así, el Consejo de Seguridad de la ONU ha autorizado a los estados miembro de la UA a desplegar un total de 19.626 uniformados, incluido un mínimo de 1.040 policías, hasta el 31 de diciembre de 2022 y a desplegar a 17.626 uniformados, con el mismo número mínimo de policías, entre el 1 de enero y el 31 de marzo de 2023.
El organismo ha reclamado además a la UA que garantice la puesta en marcha de diversas estructuras, incluidas las encargadas de supervisar las acciones de la ATMIS, así como una línea clara de mando y control y una coordinación operacional entre sus diversos contingentes.
La resolución aprobada por el Consejo de Seguridad de la ONU subraya la necesidad de hacer frente a Al Shabaab, apoyar la construcción de capacidades de las fuerzas de seguridad, entregar de forma gradual las responsabilidades de seguridad a Somalia y apoyar los esfuerzos de paz y reconciliación en el país africano.
Asimismo, establece una serie de objetivos estratégicos, incluidas operaciones conjuntas con las fuerzas de seguridad contra la rama del grupo yihadista Estado Islámico en el país, al tiempo que subraya la importancia de completar el proceso electoral, que ha sufrido numerosos retrasos desde diciembre de 2020, para lograr impulsar la transición.
Por último, pide financiación para la formación de hasta 13.900 miembros de las fuerzas de seguridad somalíes y enfatiza la necesidad de una adecuada valoración de riesgos por parte del Gobierno somalí y la ONU sobre el impacto del cambio climático sobre la estabilidad del país.
El Ejecutivo somalí mostró en un primer momento su rechazo a la modificación de la AMISOM, si bien la UA defendió al aprobar la medida que «garantizará una financiación predecible y sostenible para la futura misión a través de contribuciones valoradas por la ONU» y abogó por una «postura holística y exhaustiva, más allá de la seguridad y la estabilización».
En la actualidad un total de cinco países –Burundi, Etiopía, Kenia, Uganda y Yibuti– colaboran con tropas en la AMISOM, que cuenta con unos 22.000 efectivos y que apoya a las autoridades y las fuerzas de seguridad en su lucha contra Al Shabaab. Asimismo, la Unión Europea (UE), la ONU y Estados Unidos ayudan con financiación.
Somalia hace frente a un aumento del número de ataques por parte de la milicia islamista Al Shabaab –vinculada a la organización terrorista Al Qaeda–, tanto en la capital como en otras zonas del sur del país.