MADRID, 6 (EUROPA PRESS)
El presidente Pedro Sánchez ha defendido en el Congreso la unidad del Gobierno de coalición, aunque PSOE y Podemos sean partidos con «sensibilidades distintas», y ha desdeñado las críticas del diputado de Navarra Suma Carlos García Adanero, al que ha tachado de tránsfuga por haber sido expulsado de UPN por negarse a cumplir la directriz de apoyar la reforma laboral.
En la sesión de control, García Adanero, muy aplaudido por el PP y Vox, ha censurado las divergencias entre los socios del Gobierno en asuntos como el Sáhara Occidental y el presupuesto de Defensa, entre otros asuntos, y ha emplazado al presidente a remodelar el gabinete para terminar con esa situación y de paso ahorrar.
Pero Sánchez ha asegurado que su Gobierno afronta la crisis con «unidad» como lo hizo con la pandemia del coronavirus, aunque señala que se trata de un ejecutivo de coalición de dos partidos diferentes.
En todo caso, considera que a García Adanero «le da igual todo» y que siempre encuentra el mismo culpable para todo lo que ocurre, «Sánchez y ETA», y le ha leído el acuerdo que firmó cuando estaba en UPN contra el transfuguismo: «Esto usted lo firmó y esto es lo que usted representa: el transfuguismo», ha zanjado.
AUTOCOMPLACENCIA NINGUNA
No es la primera vez que Sánchez afea la expulsión a los dos diputados de Navarra Suma (UPN-PP-Cs), y de hecho García Adanero ha comenzado su intervención proclamando que la dirección de UPN le echó del partido porque no quiso aceptar el acuerdo alcanzado con el Gobierno de coalición. «Sigo pensando que con el sanchismo no se puede pactar», ha resaltado.
En el debate, el parlamentario navarro también ha acusado al Gobierno de vivir en la autocomplacencia, algo que Sánchez ha negado subrayando que el Ejecutivo «se hace cargo de la incertidumbre y la zozobra» que atraviesan los españoles.