CARACAS (AP) — El Banco Central de Venezuela informó el miércoles que la inflación de marzo fue la más baja desde 2012.
La tasa anual acumulada fue de 284,4%, lo que representa menos de una décima parte de la tasa registrada en marzo del año pasado, cuando se ubicó en 3.012,2%.
El índice nacional de precios (INPC) encadenó en marzo siete meses con variaciones intermensuales por debajo de 10%, destacó el BCV en un comunicado.
La inflación al cierre de marzo, en tanto, fue de 1,4%, la tasa más baja en los últimos 115 meses, cuando se ubicó en 1,1% en marzo de 2012, indicó el organismo emisor. En febrero pasado, la tasa fue de 2,9%.
La variación acumulada al cierre del primer trimestre del año se ubicó en 11,4%, 116,4 puntos porcentuales menos en relación con los tres primeros meses de 2021, acotó el escrito.
Venezuela –que por cuatro años estuvo sumida en una hiperinflación, signada por un incremento de precios de bienes y servicios en más del 50% al mes– comenzó a disminuir el índice inflacionario el año pasado.
Esa desaceleración en parte es atribuida a la decisión del gobierno del presidente Nicolás Maduro de flexibilizar el control de cambio vigente desde 2003, permitiendo la libre circulación del dólar desde mayo 2019. La hiperinflación pulverizó la moneda local.
La desaceleración, empero, no se ha traducido en un incremento del poder adquisitivo de los venezolanos en un escenario de sueldos bajos que se fijan en bolívares y precios altos que tienen como referencia su valor en dólares. Se estima que tres cuartas partes de la población venezolana vive con menos de 1,90 dólares al día, considerado el estándar internacional de pobreza extrema.
El salario mínimo fue incrementado en marzo a unos 126 bolívares mensuales, lo que equivale a unos 29 dólares al tipo de cambio oficial. El anterior salario mínimo era equivalente a 1,47 dólares, que sumado con un bono alimentaria alcanzaba en promedio los 2,95 dólares
El BCV señaló que en 12 de 13 renglones se evidenció una desaceleración en marzo en comparación con febrero: comunicaciones, la variación fue de 23,1% a 11,1%; transporte, de 6,2% a 0,1%; servicios de educación, de 17,5% a 12,2%; bebidas alcohólicas y tabaco, de 2,2% a -1,3%; restaurantes y hoteles, de 2,7% a 0,4%; alquiler de viviendas, de 2,5% a 0,5%; salud, de 0,8% a 0,5%; alimentos y bebidas no alcohólicas, de 1,1% a 1,0%, entre otros. En contraste, el renglón de vestido y calzado aumentó de 0,4% a 1,9%.