MADRID, 9 (EUROPA PRESS)
El flamante presidente del Consejo Presidencial de Liderazgo de Yemen, la nueva autoridad derivada del Gobierno reconocido del país, Rashad Al Alimi, ha prometido que apostará por la vía del proceso de paz para devolver la estabilidad al país tras más de siete años de guerra en su primer discurso televisado.
Al Alimi recoge todas las competencias entregadas esta semana por el presidente del país, Abdo Rabbu Mansur Hadi, con el objetivo de negociar con los huthis un acuerdo de paz que ponga fin a la mayor crisis humanitaria de la actualidad.
«Esperamos que este bendito consejo sea un punto de inflexión en el proceso de restauración del estado y sus instituciones, así como para hacer realidad las aspiraciones de seguridad, estabilidad y desarrollo de nuestro pueblo», ha hecho saber Al Alami en su comparecencia, recogida por la agencia Saba.
Asimismo, Al Alimi ha prometido que el Consejo cooperará con los organismos regionales, comenzando por la inciativa del Consejo de Cooperación del Golfo liderada por Arabia Saudí, su gran aliado contra la insurgencia huthi, respaldada a su vez por Irán.
Los insurgentes, al frente de la capital desde 2015 tras una ofensiva que puso en jaque al Gobierno yemení, ahora desplazado a Adén, ha desdeñado el nombramiento de esta nueva autoridad e ignorado por el momento todos los intentos para lograr una salida negociada del conflicto, convencidos como están de que las autoridades son títeres de Estados Unidos y de los saudíes.
Al Alimi aprovechó para agradecer al que ya denominó como «expresidente» Hadi, por «tomar esta valiente decisión y por la confianza que depositó en el Consejo para traer una paz integral y duradera a nuestro país».
La nueva autoridad yemení ha asegurado que «el Consejo de Liderazgo se mantendrá como un dique impenetrable para enfrentar el terrorismo en todas sus formas, y trabajará para combatir los conflictos sectarios que se entrometen en nuestra sociedad yemení».
Tras lamentar la guerra que «está destruyendo y dividiendo la comunidad yemení, y fragmentando el tejido social», Al Alimi reiteró su compromiso de trabajar «bajo paraguas de la ley hacia la igualdad y la justicia para todos».
«La ley es un estado civil moderno que preserva los derechos básicos de los yemeníes a la libertad, la dignidad y una vida mejor para todos los miembros de la sociedad, a través», recalcó, «de un proceso de paz integral que asegure que todos logren sus objetivos y aspiraciones legítimas».
