El director general de Tesla y SpaceX, Elon Musk, dice haber conseguido 46.500 millones de dólares de financiación para comprar Twitter y que está intentando un acuerdo con la compañía.
La semana pasada, Musk anunció una oferta para adquirir la firma de redes sociales pagando 54,20 dólares por acción, lo que equivale a pagar 43.000 millones de dólares. En ese momento, no dijo cómo financiaría la adquisición.
En documentos presentados el jueves ante los reguladores de valores de Estados Unidos, Musk dijo estar explorando lo que se conoce como una oferta pública para comprar en efectivo todas las acciones ordinarias de la plataforma de redes sociales por 54,20 dólares por papel. Mediante una oferta pública, Musk —que ya posee alrededor del 9% de las acciones de Twitter—, llevaría su propuesta directamente a otros accionistas, sin pasar por la junta directiva de la empresa.
Sin embargo, Musk aún no ha dicho si hará eso.
Los documentos presentados ante la Comisión de Bolsa y Valores dicen que Twitter Inc., con sede en San Francisco, no ha respondido a la propuesta de Musk.
El viernes pasado, Twitter anunció que, en respuesta a la propuesta de Musk, su Consejo de Administración adoptó por unanimidad una estrategia de defensa conocida como la “píldora venenosa”, que podría hacer que un intento de adquisición sea prohibitivamente costoso. Las llamadas “píldoras venenosas” se utilizan a menudo para defenderse de una adquisición hostil.
En los documentos presentados el jueves, Musk sostiene que el financiamiento provendría de Morgan Stanley y otras instituciones financieras. Algunos fondos estarían asegurados por acciones que Musk posee en Tesla, el fabricante de paneles solares y automóviles eléctricos. Otros bancos involucrados incluyen Barclays, Bank of America, Societie Generale, Mizuho Bank, BNP Paribas y MUFG.
Con una oferta pública de adquisición, Musk trataría de conseguir que otros accionistas le cedan sus acciones a un precio determinado en una fecha determinada. Si un número suficiente de accionistas está de acuerdo, Musk podría emplear eso como palanca para conseguir que la junta directiva abandone la defensa de la píldora venenosa.
Musk tuiteó la posibilidad de una oferta pública de adquisición varias veces esta semana.
Se dejó un mensaje el jueves en Twitter en busca de comentarios.