Dice que ahora la OEA es «más débil» y denuncia la «presión sin precedentes» por parte de «Estados Unidos y sus satélites»
MADRID, 22 (EUROPA PRESS)
Las autoridades de Rusia han tildado este viernes de «grave error» la decisión de la Organización de Estados Americanos (OEA) de suspender el estatus de Moscú como observador permanente en respuesta a la invasión de Ucrania, desatada el 24 de febrero por orden del presidente ruso, Vladimir Putin.
El embajador de Rusia en Estados Unidos, Anatoli Antonov, quien es además observador permanente ante la OEA, ha resaltado que «el objetivo de cualquier institución multilateral es unir a los países para resolver los problemas, que abundan en la región» y ha criticado que durante la sesión no se le haya permitido comparecer «ni antes ni después de la votación sobre el documento».
«Las prioridades comunes en estos días son la recuperación económica tras la pandemia, reducir la pobreza y abordar la desigualdad social. Por contra, estamos presenciando intentos destructivos de sembrar la discordia en la organización y dibujar nuevas líneas divisorias en América Latina en nombre de la conocida ‘Doctrina Monroe'», ha argüido.
Antonov ha resaltado en su comunicado, publicado en la cuenta en Facebook de la Embajada rusa en Washington, que Moscú «ha dedicado toda su energía y ha usado todas las oportunidades para contribuir los objetivos declarados por la OEA en su carta, principalmente promover la democracia, los Derechos Humanos, la seguridad y el desarrollo en el hemisferio occidental».
En este sentido, ha dicho que las autoridades rusas «cooperan activamente con la OEA desde 1992» y ha ensalzado los «esfuerzos conjuntos en la lucha contra el terrorismo y las drogas». «El potencial del uso de la experiencia de Rusia no ha sido agotado en esta parte del mundo. Tenemos experiencia en desminado humanitario, que podría ser una demanda de muchos estados de la organización», ha defendido.
Por ello, se ha preguntado «cómo ayudará a la OEA a lograr el progreso a la hora de llevar sus tareas la suspensión de la participación de Rusia, un miembro permanente del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas» y «quién ganará» por esta decisión. «Hoy, la OEA es más débil. Ha empujado a un amigo de confianza. Virtualmente, todos los estados miembro de la OEA, con pocas excepciones, han perdido con esta situación», ha dicho.
En este sentido, ha denunciado la «presión sin precedentes» por parte de «Estados Unidos y sus satélites» sobre los países de la región y ha apuntado a una «campaña concertada destinada a aislar a Rusia en el escenario internacional». «Estamos siendo castigados por defender con firmeza nuestros intereses nacionales legítimos y negarnos a obedecer a voluntades extranjeras», ha explicado.
Antonov se ha preguntado «si la lucha de liberación nacional es algo poco común» y ha recordado que «en países de América Latina duró años». «Siempre estuvimos de su lado. ¿Por qué ahora algunos desean negarnos el derecho a vivir con decencia, sin amenazas de matones fascistas desde el extranjero, y mantener una política exterior independiente?», se ha preguntado.
«La desmilitarización y la desnazificación son objetivos particulares de nuestra operación militar especial en Ucrania. Necesitamos garantizar el estatus no nuclear y neutral de este Estado del este de Europa. Lo lograremos. Es necesario para los pueblos eslavos que viven en Rusia, Ucrania y Bielorrusia», ha reiterado.
Asimismo, ha mostrado su «perplejidad» por el hecho de que «haya intentos para implantar la seguridad en Europa, totalmente ajena a la OEA, en su agenda». «Estamos indignados por la resolución, que presenta acusaciones infundadas contra Rusia sobre violaciones del Derecho Internacional», ha manifestado, si bien ha recalcado que Moscú «está abierto a continuar la cooperación» con los países de la región.