MADRID, 30 (EUROPA PRESS)
La corriente interna del PSOE Izquierda Socialista considera que este 1 de mayo, Día Internacional del Trabajo, está sembrado de incertidumbres para la clase trabajadora debido a las consecuencias derivadas de la «atrocidad» de la guerra en Ucrania, una situación que, a su juicio, obliga a reivindicar el empleo, la contención de los precios y la subida de los salarios como principales reclamaciones, a fin de evitar un «polvorín social».
En un comunicado, la Comisión Permanente Federal de Izquierda Socialista PSOE condena la «guerra lanzada por Putin» y, además de instar a los poderes públicos a unir esfuerzos para asentar un marco de seguridad común, subraya que uno de los colectivos que más está pagando las consecuencias de esta crisis son los trabajadores.
«Así, y con el acervo que nos caracteriza, decimos alto y claro que ayer y hoy, al igual que los sindicatos, nosotros defendemos la paz. Cerca de 60 conflictos tienen lugar de momento, ocasionando millones de víctimas incluyendo la pérdida de cientos de miles de vidas humanas», señala Izquierda Socialista en el comunicado.
Para esta corriente interna del PSOE, el empleo es el principal objetivo a reafirmar este 1 de mayo, tal y como defienden los sindicatos. En este sentido, sostienen que, pese a la reforma laboral aprobada este año por el Gobierno, «hay que continuar con la protección del empleo», «con una revisión de las causas y los costes del despido para evitar que se utilice como modo de ajuste, acudiendo, por el contrario, a los mecanismos de ajuste interno que contiene el acuerdo alcanzado en el seno del diálogo social».
En segundo lugar, Izquierda Socialista recoge que los sindicatos CCOO y UGT han saludado las medidas «positivas» adoptadas por el Ejecutivo de Pedro Sánchez, aunque las consideran «insuficientes» para proteger a las personas más afectadas por el alza del coste de la vida. «Hay que actuar sobre las causas de la subida de los precios energéticos y lograr un reparto equilibrado del ajuste entre todas las rentas, incluyendo a los beneficios empresariales», solicitan.
Y, por último, señalan que un aumento de la desigualdad no puede ser una de las consecuencias de esta situación, porque no se puede aceptar que «se pretenda salir de esta crisis a costa de devaluar los salarios, de generar más pobreza laboral y mayor desigualdad social». Dicho esto, apuesta por abrir una negociación colectiva que contenga la pérdida de poder adquisitivo de los salarios, «para evitar que se genere un polvorín social y poner en riesgo la recuperación económica».
Además, Izquierda Socialista, que se suma al manifiesto y a las convocatorias del PSOE para este 1 de mayo, hace un llamamiento a la clase trabajadora para que desoiga al «populismo», y «en concreto de Vox», que «no defiende a los asalariados» y, «es más, viene votando en el Congreso de los Diputados contra la clase trabajadora», afirman.