La ONU estima en 9.000 los desplazados y denuncia reclutamiento de menores y abusos sexuales
MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
Los enfrentamientos entre bandas en la capital de Haití, Puerto Príncipe, se han cobrado en apenas diez días al menos 75 vidas, entre ellas las de diez niños, según un recuento de Naciones Unidas, que ha expresado su preocupación «por el rápido deterioro de la situación de seguridad y de los Derechos Humanos» en esta zona.
La actual espiral de violencia se inició el 24 de abril y se extiende por los barrios de Croix-des-Bouquets, Tabarre y Cité Soleil. A la cifra de fallecidos recabada por la ONU a partir de «varias fuentes» se suman otros 68 heridos.
Además, unas 9.000 personas han abandonado sus hogares para refugiarse en iglesias, escuelas o con familias de acogida, si bien la ONU ha advertido de que «numerosos» ciudadanos directamente se habrían ido a otros barrios de la capital haitiana e incluso a otros departamentos.
La escalada de violencia de agosto de 2020 provocó 19.000 desplazados y limitó la circulación por algunas zonas, como vuelve a ocurrir ahora. El tránsito es complicado en alguna partes, lo cual no sólo limita el reparto de ayuda sino que amenaza con tener «efectos devastadores» en la estabilidad socioeconómica.
La violencia está limitando también la prestación de servicios básicos, tales como sanitarios o educativos. El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) estima que hay casi 1.700 escuelas cerradas en el área metropolitana de Puerto Príncipe, lo que ha dejado sin clases a unos 500.000 niños.
«Ningún niño puede ir a la escuela mientras hay balas por el aire, no es seguro», ha lamentado el representante de UNICEF en Haití, Bruno Maes.
La agencia ha recibido también «información creíble» sobre el posible reclutamiento de menores por parte de las bandas, que ofrecen a estos niños un sueldo semanal a cambio de su lealtad. Maes ha subrayado que «dar armas a los niños para que combatan o usarlos como soldados o espías es una violación de sus derechos».
La ONU ha constatado, además, casos de violencia sexual, en parte como forma de intimidación en zonas supuestamente controladas por bandas rivales. En este sentido, ha denunciado violaciones en grupo de menores de apenas diez años de edad.
Haití, el país más pobre del hemisferio occidental, atraviesa una crisis social, económica y política que se agravó en julio de 2021, con el asesinato del entonces presidente, Jovenel Moise, en circunstancias que aún se investigan.
El actual Gobierno, cuya legitimidad cuestiona parte del país, no ha logrado convocar elecciones y no hay horizonte claro a la vista para resolver un vacío institucional que se extiende también a los principales órganos legislativos y al sistema judicial.