MADRID, 11 (EUROPA PRESS)
El Villarreal presentó este miércoles el proyecto de renovación del Estadio de la Cerámica, que se va a modernizar sin aumentar su actual capacidad, unas obras con un presupuesto estimado en 35 millones de euros y que le obligarán a jugar en el Ciutat de València desde la temporada que viene hasta final de este año.
El club que preside Fernando Roig acometerá esta remodelación, que será realizada por la empresa internacional de ingeniería y arquitectura IDOM y la empresa de construcción local Alviben, para tener listo su feudo antes del año de su Centenario, en 2023.
El Villarreal ya había reformado El Madrigal para transformarlo en 2017 en La Cerámica, pero ahora llevará a cabo «la mayor transformación que ha vivido» el estadio, en lo que será «un importante paso para el proyecto del club amarillo, ilusionante, ambicioso y sostenible», señaló la entidad.
«La metamorfosis del nuevo feudo ‘groguet’ dotará al estadio de unidad arquitectónica, mejorará la calidad y la experiencia de los aficionados en el campo y conseguirá que el Estadio de la Cerámica cree una atmósfera incomparable de fútbol donde vivir increíbles sensaciones», añadió el Villarreal.
Los plazos previstos para esta reforma son desde el próximo lunes 16 de mayo, un día después de jugar el último partido como local de LaLiga Santander ante la Real Sociedad, hasta finales de diciembre de 2022. La fecha fijada para volver a jugar en La Cerámica es entre el 29 y 31 de diciembre, coincidiendo con la jornada 15, la primera tras el parón por el Mundial de Catar.
Por ello, el Villarreal CF solicitará a LaLiga «disputar la mayor cantidad de encuentros permitidos a domicilio al comienzo de la competición», mientras que hasta el fin de las obras jugará los partidos como local en el Ciutat de València. «Por ello, el club quiere agradecer al Levante UD la disposición y facilidades que ha brindado al Villarreal CF con la cesión de su estadio», recalcó.
Esta transformación contará con un presupuesto estimado de 35 millones de euros y obligará al club castellonense a hacer «un importante esfuerzo económico, a pesar de las dificultades y la crisis de suministros, para modernizar su campo y ofrecer la mejor experiencia a sus aficionados en la temporada del centenario del club».
Las obras requerirán la utilización de 2.400 toneladas de acero, 12.900 metros cuadrados de cubierta, 8.700 metros cuadrados de fachada cerámica y 4.400 metros de micropilotes.
MANTENDRÁ SU ACTUAL AFORO DE 22.000 ESPECTADORES
Entre las novedades de esta reforma está la construcción de la nueva grada en la esquina, entre los graderíos de Preferencia y Fondo Sur, logrando así el cerramiento al completo del estadio, el cubrimiento de todo el aforo, la mejora en las infraestructuras para «mejorar la calidad y la experiencia de los aficionados», con dos nuevos videomarcadores de 300 m2 de pantalla, nuevas megafonía e iluminación deportiva y arquitectónica LED, y la instalación de la ‘Sky-Cam’.
También se crearán nuevos espacios interiores como una sala polivalente en coronación del Fondo Sur con vistas al terreno de juego y a la plaza, la remodelación integral del restaurante y un nuevo espacio para el museo del club.
El Villarreal apostará igualmente por las energías renovables a través de la instalación de paneles fotovoltaicos en la cubierta para el autoconsumo del recinto y procederá a la renovación total de los asientos. Aunque no tocará su capacidad actual para 22.000 aficionados, si lo hará más cómodo para sus seguidores con un mayor espacio entre localidades de Preferencia.