Justo cuando los estadounidenses se preparan para los viajes por carretera de verano, el precio del petróleo permanece obstinadamente elevado y sube el precio de la gasolina a niveles dolorosos.
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El martes, los conductores pagaban en promedio 4.37 dólares por galón (1.15 dólares por litro) de gasolina regular, según la asociación experta en el sector AAA. Eso representa 25 centavos más por galón que hace un mes y 1,40 dólares más que hace un año.
“El precio de la gasolina es ridículo”, manifestó Joel Baxter, un enfermero que llenaba el tanque de su auto en una estación BP en Brooklyn, Nueva York, para poder recorrer 42 kilómetros (26 millas) a su trabajo. “El dinero, tu salario, es prácticamente el mismo, y todo está subiendo, así que deberían hacer algo al respecto”.
El elevado precio del petróleo es la principal causa de los altos precios de la gasolina. Un barril del crudo de referencia estadounidense se vendía el martes a unos 100 dólares, un precio que ha subido a lo largo del año. El elevado precio del petróleo en gran parte se debe a que muchos compradores se niegan a comprar petróleo ruso por la invasión a Ucrania. La Unión Europea considera imponer un embargo sobre el petróleo de Rusia, que es un importante proveedor. Con esas presiones, se reduce el petróleo disponible.
Conductores como Baxter dicen que les gustaría que el gobierno hiciera algo para ayudar, aunque pocos pueden pensar en una solución con un alivio duradero.
“Hay pocas cosas que un presidente puede hacer para ayudar a reducir el costo del petróleo, y este gobierno intentó prácticamente todo lo que puede”, dijo Andrew Gross, vocero de la AAA.
El presidente Joe Biden liberó petróleo de la Reserva Estratégica en noviembre y marzo, con la esperanza de reducir el precio. Eso ayudó temporalmente, pero los precios se volvieron a disparar y se mantienen elevados.
Biden enfatizó el martes que luchar contra la inflación es su prioridad, una señal tanto de los desafíos económicos causados por el aumento de precios al ritmo más rápido en cuatro décadas como del lastre político que ha causado a los demócratas.
“Creo que la inflación actualmente es nuestro principal desafío”, dijo Biden.
Agregó que distanciarse de los combustibles fósiles y una mayor eficiencia energética finalmente protegerán a los estadounidenses de costos más elevados en gasolina, calefacción y refrigeración.
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La periodista de Associated Press Lisa Matthews en Washington contribuyó a este despacho. Boak reportó desde Washington.
