ABUYA, Nigeria (AP) — Las autoridades de Nigeria ordenaron un toque de queda en un estado del noroeste del país donde cientos de personas protestaron el sábado para exigir la liberación de los sospechosos de haber matado brutalmente a una estudiante cristiana acusada por blasfemar contra el islam.
El gobernador del estado de Sokoto, Aminu Tambujal, impuso un toque de queda de 24 horas “con efecto inmediato”, al tiempo que la protesta crecía en la capital del estado en medio de tensiones religiosas.
La víctima, identificada como Deborah Samuel, murió apedreada, golpeada y quemada el viernes en el Colegio de Educación Shehu Shagari, en el estado de Sokoto, tras ser acusada de “hacer un post en las redes sociales que blasfemaba… al profeta Mahoma”, indicó la policía.
Las autoridades cerraron la escuela y pidieron a los demás alumnos que desalojaran las instalaciones. Sin embargo, estudiantes se manifestaron el sábado para exigir que la policía liberara a sus dos compañeros detenidos como sospechosos en relación con el asesinato.
La muerte de Samuel, una creyente cristiana, pone de manifiesto la profunda división religiosa en el país más poblado de África, donde la violencia estalló en el pasado en respuesta a acciones o comentarios considerados antiislámicos.
En el lejano estado de Kaduna, a unos 500 kilómetros (310 millas) de Sokoto, el gobierno estatal también prohibió las protestas “relacionadas con la actividad religiosa”, alegando “movimientos de algunos elementos antipatrióticos” para organizar una manifestación por el incidente en Sokoto.
Tanto los líderes cristianos como los musulmanes condenaron el asesinato de la estudiante y pidieron que se procesara a los autores.
El presidente nigeriano Muhammadu Buhari “declaró que la noticia del asesinato de la joven cometido por otros estudiantes era preocupante y exigió una investigación imparcial y exhaustiva de todo lo ocurrido antes y durante el incidente”, según el comunicado de un portavoz.