MADRID, 18 (EUROPA PRESS)
Las autoridades de Mozambique han notificado el primer caso de polio desde 1992, el segundo importado del que se tiene constancia en el sur de África tras el detectado en Malaui el pasado mes de marzo, lo que para la Organización Mundial de la Salud (OMS) es motivo de «gran preocupación».
En el caso de Mozambique, el virus –poliovirus salvaje de tipo 1– ha sido hallado en un niño de la provincia de Tete, en el noreste del país, que sufría parálisis desde finales de marzo. El análisis genético ha vinculado el contagio a una cepa detectada en Pakistán en 2019, como ya había ocurrido en Malaui.
La OMS ha señalado que se trata de casos importados y, por tanto, no afectan a la catalogación del continente como zona libre de polio salvaje y, según la responsable de la agencia para África, Matshidiso Moeti, la aparición de nuevos contagios «no es una sorpresa» habida cuenta de lo rápido que puede expandirse el virus.
«Estamos apoyando a los gobiernos del sur de África para que aceleren la lucha contra la polio con campañas de vacunación a gran escala que frenen el virus y protejan a los niños de su impacto dañino», ha explicado.
Mozambique ya había vacunado a 4,2 millones de niños tras la detección del primer caso en Malaui, dentro de una batería de medidas que también se extienden a Tanzania, Zambia y Zimbabue y que aspiran a alcanzar a 23 millones de niños menores de cinco años.
La polio sólo es endémica a día de hoy en Afganistán y Pakistán y sus efectos son especialmente devastadores para los niños de corta edad, que pueden sufrir secuelas de por vida. No hay cura para este virus, por lo que la única forma de combatirlo es mediante la inmunización generalizada.