MADRID, 23 (EUROPA PRESS)
El medio de comunicación ha indicado en declaraciones concedidas a Europa Press que tres de sus trabajadores fueron arrestados el 19 de mayo, mientras que uno fue detenido un día después. "Hemos confirmado que cuatro de nuestros empleados están encarcelados, mientras que no podemos contactar con otros dos", ha señalado.
Así, ha detallado que tres de los detenidos son trabajadores a jornada completa, mientras que otro estaba en periodo de prácticas. "Hay gente que nos ha dicho que dos de ellos están en la prisión local de Bahir Dar y que otros dos han sido llevados a otra cárcel que está a unos 185 kilómetros de Bahir Dar", ha manifestado.
Nisir International Broadcasting Corporation ha asegurado que las autoridades de Amhara por ahora no les han permitido contactar con los detenidos y ha dicho no conocer los motivos de los arrestos. "Estaban trabajando, llevando a cabo su tarea como un día normal", ha recalcado.
En este sentido, el medio ha relatado que una persona encargada de la limpieza en el estudio presente en el momento de las detenciones ha trasladado que los agentes "invadieron" el lugar. "La empleada se fue y no sabe qué pasó después. Tras unos minutos, les subieron a un coche policial y se los llevaron, según nos dijeron miembros de la comunidad local", ha apuntado.
"También se llevaron siete ordenadores, tres dispositivos de almacenamientos cargados con materia de producción, tarjetas de memoria y otro equipamiento", ha denunciado, antes de asegurar que "hay una operación en marcha contra ciertos grupos de personas en la región de Amhara y también en la capital, Adís Abeba.
"Han secuestrado a cientos de personas, si no miles, especialmente entre trabajadores de los medios, activistas de comunidades, guardas locales, líderes de partidos políticos de Amhara, funcionarios y así. Han matado también a muchos de ellos durante los últimos días", ha señalado, antes de incidir en que la campaña está dirigida "específicamente contra amharas".
La región de Amhara se ha visto sacudida por el conflicto que estalló en noviembre de 2020 entre el Ejército y el Frente Popular para la Liberación de Tigray (TPLF). El grupo, antiguo partido principal de poder en Etiopía, extendió la ofensiva a Amhara y Afar, mientras que milicias y fuerzas de seguridad de esta región participaron en los combates del lado del Gobierno central.
El TPLF acusa al primer ministro, Abiy Ahmed, de azuzar las tensiones desde su llegada al poder en abril de 2018, cuando se convirtió en el primer oromo en acceder al cargo. Hasta entonces, el TPLF había sido la fuerza dominante dentro de la coalición que gobernó Etiopía desde 1991, el Frente Democrático Revolucionario del Pueblo Etíope (EPRDF), sustentada en las etnias. El grupo se opuso a las reformas de Abiy, que consideró como un intento de socavar su influencia.