TALLAHASSEE, Florida, EE.UU. (AP) — Los proveedores de servicios de salud reproductiva demandaron el miércoles a Florida por una nueva ley que prohíbe los abortos después de las 15 semanas de embarazo, una de numerosas impugnaciones a ese tipo de leyes aprobadas en todo el país por líderes republicanos en anticipación a un posible fallo de la Corte Suprema de Estados Unidos que limitaría el procedimiento.
El documento judicial incoado en el tribunal estatal de Tallahassee por parte de Planned Parenthood y otros centros de salud alega que la ley viola una disposición de la Constitución estatal que garantiza el derecho de las personas a la privacidad, “incluido el derecho al aborto”.
“La HB 5 restringe radicalmente la capacidad de los floridanos para tomar decisiones acerca de continuar o no un embarazo y tener un hijo, en violación de sus derechos bajo la Constitución de Florida”, se afirma en el texto.
El gobernador republicano Ron DeSantis promulgó en abril la prohibición de abortar después de las 15 semanas de embarazo, parte de un creciente movimiento conservador para restringir el acceso al procedimiento después de que en un borrador de opinión de la Corte Suprema que fue filtrado se señalara que el máximo tribunal confirmaría una ley de Mississippi que prohíbe los abortos después de las 15 semanas. Esa decisión, que se prevé sea emitida este verano, podría debilitar o revocar el fallo del caso de Roe contra Wade y hacer improbable que otras impugnaciones tengan éxito.
La oficina de DeSantis no devolvió de inmediato un correo electrónico solicitándole comentarios.
La ley de Florida, que entrará en vigor el 1 de julio, contiene excepciones si el aborto es necesario para salvar la vida de la madre, evitar lesiones graves o si el feto tiene una anomalía mortal. No permite exenciones en casos en que los embarazos hayan sido causados por violación, incesto o tráfico de personas. Bajo la ley actual, Florida permite el aborto hasta las 24 semanas.
Un informe federal de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) señala que aproximadamente el 2% de los casi 72.000 abortos reportados en Florida en 2019 se realizaron después de las 15 semanas. Ese mismo año, 2.256 residentes de otros estados se sometieron a abortos en Florida, y la mayoría —unas 1.200— provenían de Georgia y más de 300 de Alabama, según los CDC. El origen del resto de pacientes no estaba claro.