MADRID, 10 (EUROPA PRESS)
Las autoridades de Irán han anunciado este viernes que han empezado a inyectar gas en las nuevas centrifugadoras instaladas en el marco de su programa nuclear, un paso anunciado después de la resolución aprobada por el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) criticando a Teherán por no dar explicaciones sobre las trazas de uranio detectadas en tres enclaves no declarados previamente.
"Hemos instalado nuevas centrifugadoras y hemos empezado a inyectar gas en ellas. Los inspectores de la agencia --en referencia al OIEA-- vinieron y vieron cómo se inyectaba gas en las máquinas avanzadas", ha señalado el jefe de la Organización de la Energía Atómica de Irán (OEAI), Mohamad Eslami, en una entrevista con la cadena de televisión iraní IRIB.
"Nuestras actividades nucleares pacíficas continúan en un ambiente técnico excelente y bajo la influencia de las normas de la agencia", ha manifestado, antes de confirmar que Teherán "ha puesto fin a las actividades de varias cámaras de la agencia al margen del acuerdo de salvaguardias".
El director general del OIEA, Rafael Grossi, desveló el jueves que Teherán había comunicado al organismo su decisión de retirar 27 cámaras de sus instalaciones nucleares y subrayó que esto "supone un desafío grave" a la capacidad del OIEA de seguir trabajando en el país y "confirmar lo correcto de la declaración de Irán bajo el acuerdo nuclear de 2015".
Sin embargo, el director de la OEAI ha incidido en que las autoridades iraníes "mantuvieron las cámaras en su lugar, en línea con el acuerdo nuclear, para mostrar buena voluntad" y ha explicado que la decisión de retirarlas llega "tras las acusaciones falsas e inaceptables" contra Teherán.
Eslami ha denunciado además que "el OIEA es un rehén del régimen israelí" y ha manifestado que "durante los últimos 20 años, todos los métodos, comportamientos, operaciones psicológicas, sanciones y resoluciones impuestas iban en línea con la política de detener a Irán", según ha recogido la agencia iraní de noticias Mehr.
"Es lamentable que una institución internacional haya sido explotada por un régimen ilegítimo y que su reputación haya sido destruida", ha sostenido Eslami, que ha reiterado que Irán "ha anunciado oficialmente" que su programa nuclear "va en línea con la carta del OIEA". "El OIEA tiene el deber de ayudar a los países a desarrollar sus programas nucleares", ha zanjado.
Por su parte, el presidente de Irán, Ebrahim Raisi, ha hecho hincapié en que "es imposible hablar con Irán usando el lenguaje de la fuerza". "Básicamente creemos que esta decisión (de aprobar la resolución) fue algo incitado por los sionistas", ha explicado.
"Hemos dicho a la agencia que este tipo de decisiones no harán que Irán dé marcha atrás", ha manifestado el mandatario, que ha reiterado que los "derechos legítimos" del país no pueden ser ignorados. Por ello, ha pedido a los países occidentales que "entiendan que Irán tiene su punto de vista y habla con lógica", tal y como ha informado la agencia IRNA.
Tras el anuncio de Irán sobre la retirada de las cámaras del OIEA, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, ha criticado a Teherán por "amenazar con nuevas provocaciones nucleares" y "más limitaciones a la transparencia", antes de subrayar que Washington "está preparado para finalizar un acuerdo" para la reactivación del pacto de 2015 "en base a los entendimientos negociados con los aliados europeos en Viena durante muchos meses".
"Un acuerdo de este tipo ha estado disponible desde marzo, pero sólo pueden terminarse las negociaciones y aplicarlo si Irán retira sus demandas adicionales, que son ajenas al acuerdo nuclear", ha manifestado, en referencia a exigencias como la retirada de la Guardia Revolucionaria de la lista de Estados Unidos sobre organizaciones terroristas.
Irán ha anunciado la retirada de sus compromisos sobre varios de los puntos del acuerdo nuclear de 2015 después de que Estados Unidos se saliera del pacto de forma unilateral en 2018, si bien las autoridades iraníes han defendido que estos pasos pueden revertirse si Estados Unidos retira las sanciones y vuelve al acuerdo.