A pesar de los avances logrados en las últimas décadas en materia de participación femenina en el ámbito laboral, las mujeres latinas aún enfrentan diversos obstáculos para equilibrar su desarrollo profesional con la maternidad, señala Angélica Fuentes.
De acuerdo con la especialista en materia de género, los aspectos culturales e institucionales en América Latina convierten a la maternidad en un factor determinante para profundizar la brecha de género en el ámbito laboral.
Cifras del Banco de Desarrollo de América Latina muestran que la brecha de género en Latinoamérica es muy significativa, en particular en el área económica; la tasa de participación laboral femenina es 27% inferior a la de los hombres.
Además, muestra que las mujeres ganan alrededor de 17% menos que sus similares masculinos, y están subrepresentadas en puestos de alto nivel, tanto en el sector público como privado.
La participación laboral de las mujeres en Latinoamérica cae drásticamente luego del nacimiento del primer hijo, motivándolas a buscar alternativas para generar ingresos. Muchas mujeres emprenden porque el sistema corporativo no se adapta a sus nuevas necesidades.
— Señaló Angélica Fuentes.
Cuando una mujer se convierte en mamá y enfrenta dificultades adicionales para balancear su vida personal y profesional, emprenden negocios con el objetivo de liberarse de las inadecuadas condiciones para combinar la crianza con las exigencias del trabajo.
En ese sentido, de acuerdo con el noveno informe anual State of Women-Owned Businesses Report, realizado por American Express, las mujeres latinas están iniciando sus negocios en sus propios términos, ya sea con un enfoque de tiempo completo o tiempo parcial (denominado “sidepreneurship”).
El impacto económico de las empresas propiedad de mujeres es innegable, desde los billones que generan hasta los millones de puestos de trabajo que proporcionan.
— advierte Courtney Kelso, Vicepresidente Senior de American Express.
Datos del mismo informe señalan que en los últimos cinco años, en Estados Unidos el crecimiento del número de mujeres emprendedoras de medio tiempo ha crecido casi el doble de rápido que el emprendimiento femenino: 39% frente al 21%, respectivamente.
Asimismo, las mujeres de distintas descendencias, entre las que destacan las de origen latino, son responsables de una gran parte de ese crecimiento; el 43% corresponde a las empresas desarrolladas por mujeres latinas.