BRUSELAS, 20 (EUROPA PRESS)
La opinión del Ejecutivo comunitario servirá de base para el debate entre jefes de Estado y de Gobierno de la cumbre los próximos 23 y 24 de junio, en el que los Veintisiete decidirán no solo qué responden a la petición de entrada al club de Ucrania, sino también de Georgia y Moldavia.
Si bien la cuestión no está oficialmente sobre la mesa, será la primera vez que los Veintisiete se vean las caras antes de una semana que se percibe clave para la perspectiva europea de Kiev. Las divisiones y reticencias que parecía suscitar la adhesión de Ucrania entre un importante número de países del bloque, parece haber quedado despejadas ahora por las condiciones que señala Bruselas para proponer el estatus de candidato y que previsiblemente concretarán los líderes europeos.
Fuentes diplomáticas afirman que serán esa letra pequeña la que empiecen a tratar los miembros de la UE y acuerden en el seno del Consejo Europeo de finales de semana. Más allá de los países del Este, los que más fervientemente han respaldado la adhesión de Ucrania, hay un importante número de Estados miembros que esperan que las condiciones sean claras y se respeten los procesos y normas europeos en la senda europea de Kiev.
Así las cosas, la cita de ministros de Exteriores hará seguimiento a la situación en Ucrania y estudiará las repercusiones internacionales del conflicto, en concreto la falta de seguridad alimentaria mundial por el bloqueo a las exportaciones de cereales ucranianos.
En este aspecto, la UE respalda los trabajos de Naciones Unidas, aunque los ministros estudiarán la opción más importantes sobre la mesa para sacar el grano de Ucrania: la vía marítima con la vista puesta en Estambul donde las autoridades turcas celebrarán un encuentro para coordinar que Rusia desbloquee del mar Negro.
La diplomacia comunitaria quiere ganar la batalla comunicativa y recalcar que el encarecimiento de la energía y de los alimentos se debe a las acciones rusas en Ucrania e insiste en que las sanciones europeas no afectan a las exportaciones. Eso sí, por el momento no se plantea retirar las restricciones y afirma que solo se levantarán cuando Rusia se retire de territorio ucraniano, respete la soberanía de Ucrania y cese las injerencias en el Donbás o la expedición de moneda y pasaportes rusos en las zonas ocupadas.
