MADRID, 21 (EUROPA PRESS)
El primer ministro de Israel, Naftali Bennett, ha subrayado este martes que sigue trabajando "de forma ordenada y responsable" tras anunciar el lunes un acuerdo con su principal socio de coalición para presentar un proyecto de disolución del Parlamento que derivaría en una convocatoria de elecciones anticipadas, las quintas en cerca de tres años y medio.
"Sigo gestionando el país de forma ordenada y responsable hasta la fecha del reemplazo", ha manifestado, en referencia al hecho de que el ministro de Exteriores, Yair Lapid, le sustituirá como primer ministro si el proyecto es aprobado por la Knesset, una votación prevista para este miércoles.
"El Estado y los desafíos siguen existiendo todo el año", ha señalado Bennett a través de un mensaje en su cuenta en la red social Twitter en el que ha destacado "el privilegio" que ha supuesto para él ser primer ministro de Israel. "Gracias y abrazos por los miles de mensajes de ánimo", ha apuntado.
El portavoz del presidente de la Knesset, Mickey Levy, ha explicado en declaraciones al diario 'The Times of Israel' que la coalición espera presentar el miércoles el proyecto para la disolución del Parlamento ante los planes de la oposición de intentar formar un Gobierno recabando apoyos entre los actuales parlamentarios.
El Likud del ex primer ministro Benjamin Netanyahu ha estado manteniendo contactos para intentar atraer a integrantes derechistas de la actual coalición --integrada por una amalgama de ocho partidos, incluida la Lista Árabe Conjunta-- con el objetivo de obtener mandato y evitar acudir de nuevo a las urnas para unas elecciones que, debido a los límites legales y las vacaciones, podrían celebrarse a finales de octubre.
La oposición controla en estos momentos 55 de los 120 escaños del Parlamento, mientras que la Lista Árabe Conjunta, que ha rechazado apoyar a Netanyahu, cuenta con seis. Sin embargo, el Likud espera obtener apoyos entre miembros de partidos derechistas descontentos con la coalición.
El Gobierno ha perdido su escueta mayoría --que llegó a ser de 61 escaños cuando se formó el Ejecutivo-- en medio de importantes tensiones en el seno de la coalición, lo que finalmente llevó a Bennett y Lapid a anunciar el lunes que sus esfuerzos para mantener ensamblado el Ejecutivo han sido infructuosos.
En este contexto, varios parlamentarios, incluidos algunos del ultraderechista Yamina --la formación de Bennett--, se han mostrado a favor de formar un nuevo Gobierno de derechas en el marco de la actual Knesset, mientras que Nueva Esperanza, el partido del ministro de Justicia, Gideon Saar --quien abandonó el Likud por sus diferencias con 'Bibi'--, habría mantenido contactos informales con el Likud a tal fin.
LIEBERMAN PIDE EVITAR EL RETORNO DE 'BIBI'
Por contra, el ministro de Finanzas y líder del ultraderechista Yisrael Beitenu, Avigdor Lieberman, ha recalcado este mismo martes que debe impedirse que Netanyahu vuelva al poder. El político, que fue aliado de 'Bibi', ha protagonizado durante los últimos años un drástico distanciamiento del ex primer ministro israelí.
Lieberman ha afirmado que la caída del Gobierno de Israel "es el resultado de las intrigas, las mentiras y la subversión de un hombre, Benjamin Netanyahu", ha manifestado durante un acto en Jerusalén y ha incidido en que evitar que vuelva al poder es "el principal" objetivo.
"Si Netanyahu estuviera realmente preocupado por el Estado de Israel, sus socios y su partido, habría entregado el liderazgo del Likud y del Gobierno, tomándose un tiempo hasta el fin de los procedimientos legales contra él", ha argüido, en referencia a los casos por presunta corrupción abiertos contra él.
'Bibi', que convirtió en la primera persona en la historia en ser imputada mientras ocupa el cargo de primer ministro de Israel --cargo que abandonó en junio de 2021--, está acusado de recibir sobornos, fraude y violación de la confianza en tres casos separados, tras las investigaciones encabezadas por Mandelblit.
"Se preocupa por sí mismo y su familia por encima del país", ha criticado Lieberman, que ha reiterado que "este hombre no debe volver", según ha recogido el diario 'Yedioth Ahronoth'. "Haré todo lo posible para evitar que esto pase y, en cuanto sea posible formaremos un Gobierno que pueda actuar en nombre de los ciudadanos de Israel", ha reseñado.
En este sentido, ha apuntado que "la inestabilidad política daña la sociedad, la economía y la seguridad" y ha abogado por un cambio en el sistema electoral en Israel, si bien ha lamentado que no haya una mayoría suficiente en la Knesset para aprobar estas enmiendas.
El propio Netanyahu celebró el lunes la caída del Gobierno, que describió como "una gran noticia para millones de ciudadanos israelíes". "Tras un año de lucha decidida de la oposición en la Knesset y tras el gran sufrimiento de la población de Israel, está claro para todo el mundo que ha llegado a su fin el peor gobierno de la historia israelí", afirmó.
Así, prometió que habrá un gobierno del Likud que "cuidará" de "todos los ciudadanos de Israel, sin excepción". "Reduciremos impuestos, bajaremos los precios y llevaremos a Israel a hitos maravillosos como la ampliación del círculo de paz, como ya hemos hecho antes", dijo.
El actual Gobierno asumió el poder en junio de 2021 tras doce años consecutivos de Netanyahu como primer ministro de Israel. La coalición, no obstante, está formada por ocho partidos que abarcan todo el espectro político después de un histórico acuerdo para evitar unas nuevas elecciones, después de que tuvieran que celebrarse cuatro comicios en dos años ante la incapacidad de formar mayorías.