MADRID, 23 (EUROPA PRESS)
El primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, ha acusado a los detractores del acuerdo con Ruanda para enviar a Kigali a solicitantes de asilo que lleguen al país de tener "actitudes condescendientes" hacia el país africano, justo antes de viajar a la capital ruandesa para una cumbre de la Commonwealth.
Johnson ha subrayado que el hecho de que Ruanda vaya acoger esta cumbre "es una oportunidad para que todos entiendan lo que este acuerdo tiene que ofrecer, lo que los ruandeses tienen que ofrecer, y ayudar a acabar con algunas de estas actitudes condescendientes hacia Ruanda", según ha informado la cadena de televisión británica Sky News.
Así, ha bromeado incluso con su viaje y ha dicho ser consciente de que llegará a Kigali antes que "cualquiera que haya viajado ilegalmente a través del Canal (de la Mancha), al tiempo que ha vuelto a defender la política de deportación de solicitantes de asilo.
El 'premier' británico se reunirá en Kigali con el príncipe Carlos, quien se habría mostrado crítico con el plan del Gobierno británico, si bien Johnson ha quitado hierro al asunto y ha argüido que "no hay pruebas" sobre "los comentarios del príncipe".
"Es un plan para hacer frente a los grotescos abusos contra las personas que cruzan el Canal", ha sostenido el primer ministro británico, que ha reiterado que "no ha sido declarado ilegal por ningún tribunal", a pesar de las numerosas críticas internacionales a esta política.
Tras su llegada a Kigali, Johnson se ha reunido con el presidente ruandés, Paul Kagame, al que ha felicitado por el "extraordinario" desarrollo económico y social "en sólo unas décadas", según un comunicado publicado por Downing Street, en el que además se recoge que ambos han "ensalzado" su acuerdo a nivel migratorio para hacer frente a las "peligrosas bandas de contrabando de personas".
Asimismo, el primer ministro británico ha destacado la "postura moral" de las autoridades ruandesas respecto a la invasión rusa de Ucrania, mientras que ambos han abordado las vías para hacer frente al drástico aumento de los productos básicos como consecuencia del conflicto.
Por su parte, la Presidencia ruandesa ha señalado en un breve mensaje en su cuenta en la red social Twitter que "los dos líderes han mantenido conversaciones sobre las colaboraciones existentes entre Ruanda y Reino Unido, incluido la reciente Asociación para Migración y Desarrollo Económico".
El primer vuelo de deportación a Ruanda fue cancelado la semana pasada a raíz de una orden del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH), si bien el vice primer ministro británico, Dominic Raab, argumentó posteriormente que la decisión fue "bastante errónea" porque el Tribunal de Estrasburgo utilizó un poder especial para bloquear la expulsión de algunos de los solicitantes de asilo.
Por su parte, la portavoz del Ejecutivo ruandés, Yolande Makolo, expuso ante la prensa que su Gobierno está ofreciendo a los migrantes que llegaron a territorio británico una "nueva vida". Así, explicó que se les brindará todo tipo de apoyo, incluido alojamiento, y que aunque Ruanda rechace su petición formal de asilo podrán solicitar la residencia legal.
El acuerdo con Ruanda permite a las autoridades británicas enviar al país africano a los solicitantes de asilo que crucen el Canal de la Mancha. Dicha iniciativa está dotada con 120 millones de libras --144 millones de euros-- y se centrará sobre todo en hombres sin cargas familiares que lleguen a Reino Unido a través de embarcaciones o camiones.