LA HABANA (AP) — Cuba acumula 64 días sin reportar decesos por el nuevo coronavirus y la situación se encamina a un relativo control, informó este jueves el ministro del ramo, José Ángel Portal Miranda, aunque ahora la presencia del dengue puso en alerta a los servicios de salud.
“A partir del mes de febrero comenzó a disminuir el número de contagios (de COVID-19), reduciéndose sostenidamente durante 11 semanas consecutivas el número de positivos en todo el país. Al cierre del mes de junio, la transmisión de la epidemia de COVID-19, disminuyó en un 69.3% con respecto al mes de mayo”, aseguró Portal en una conferencia de prensa.
En este mes el promedio de nuevos casos diarios es de unos 50 pacientes, agregó el funcionario para quien la pandemia no ha terminado en tanto el virus siga circulando, por lo que no se descarta que nuevas subvariantes de ómicron provoquen en el futuro tensión.
Cuba comenzó un paulatino regreso a la normalidad con reaperturas de aeropuertos y recepción de vuelos, eliminación de los PCR obligatorios para viajeros y obligatoriedad del uso del barbijo en los pasados meses, luego de dos años de confinamiento.
A la fecha se reportan en la isla 1,1 millones de contagios acumulados, de los cuales 8.529 fallecieron.
Según los laboratorios isleños en el primer semestre la variante ómicron BA.2 fue la predominante, pero ya comenzó a circular la subvariante BA.5 sobre todo en el occidente del país, mucho más contagiosa pero menos letal.
Portal destacó el valor de la vacunación, que en la isla se desarrolló con tres antígenos de producción nacional --los únicos en América Latina--, las Soberana 02, Soberana Plus y Abdala. Ahora se evalúa la aplicación de un nuevo refuerzo.
A la fecha el 90% de la población cuenta con el esquema completo --tres dosis-- y se han aplicado más de 38 millones de inmunizaciones, incluidos menores de edad a partir de los dos años.
Sin embargo, la llegada del verano puso en tensión al sistema estatal de salud cubano debido a un incremento de los casos de dengue con un aumento de “los focos” --los criaderos-- del mosquito transmisor aedes aegypti, reconoció Portal.
Desde comienzo de año se reportaron 3.036 casos de dengue. La cifra de enfermos y “focos” —criaderos de mosquitos— es superior, dijo el funcionario. Los peores meses son de julio en adelante debido a un incremento de la humedad, advirtió.
Portal no especificó la diferencia, pero la semana pasada la directora nacional de vigilancia del Ministerio de Salud, Madelaine Rivera, informó que se había producido un aumento de 21% en los criaderos.
El dengue, que en algunos casos puede llevar a la muerte, es endémico en Cuba y la mayoría de los países tropicales y suele controlarse con fumigación, control por parte de la población de lugares donde anida y medios biológicos, como peces en estanques.
La mala noticia del dengue, que tiene el potencial de convertirse en epidemia si no se controla, llega en momentos en que la isla tiene dificultades financieras para comprar y producir medicamentos para atender a la población.
“Es una situación es muy difícil, no solo con los medicamentos sino con un conjunto de insumos y gastables que hoy afectan servicios en nuestras instituciones hospitalarias. Enfrentamos numerosas limitaciones”, reconoció el ministro Portal.