MADRID, 29 (EUROPA PRESS)
A tan solo unas horas de que el Congreso vote la medida, Dredsner ha manifestado que "espera que los parlamentarios vuelvan a aprobar la extensión porque no se trata de derechas o izquierdas sino de la seguridad en un conflicto que hay que resolver como país".
Dredsner ha insistido así en que el estado de excepción ha permitido "reducir los hechos de violencia registrados en la zona", lo cual es "muy positivo porque permite llegar con las otras cosas: con la presencia del Estado, con las inversiones en el territorio y con que las empresas".
Pese a solicitar su extensión, la delegada presidencial ha reconocido que todos los integrantes del Gobierno "entendemos que el estado de excepción no es la solución al conflicto", según ha informado el portal de noticias Emol.
Por eso, ha dicho, el Gobierno ha decidido apostar por la persecución del crimen organizado". "Vamos a por el plan 'Buen Vivir', que implica inversión en el territorio". En este sentido, ha lamentado que el proyecto de infraestructura crítica "no haya avanzado legislativamente hablando" y no se hayan establecido condiciones para "recuperar los territorios de manos del crimen organizado" en la Macrozona Sur.
"Nosotros lamentamos profundamente que se haya rechazado el proyecto de infraestructura crítica. Nosotros creemos las razones de fondo de ese rechazo no tienen que ver con el proyecto en sí mismo ni con la herramienta, sino que un poco una jugada política. Y lo lamentamos más que todo porque creemos que aquí hay que ponerse al servicio de las mejores opciones para la ciudadanía y no sólo de contradecir al Gobierno, sino que realmente pensar qué es lo mejor para todos", ha lamentado.
Sin embargo, ha recalcado que desde el Gobierno van a seguir "avanzando" al respecto. "La recuperación está relacionada con la eficiencia a la hora de perseguir el crimen organizado, y eso depende no sólo del poder Ejecutivo, sino que también depende del poder legislativo y judicial, porque hay algunas cosas para el combate que requieren de modificaciones legislativas".
"Es algo que depende de la voluntad del Estado en su compresión", ha continuado antes de aclarar que, además, también hay que tener en cuenta "los avances que el Parlamento puede cosechar". "Eso también podría tener un efecto muy grande sobre la otra parte del conflicto que tiene que ver con el conflicto intercultural y con las reivindicaciones de los pueblos originarios", ha afirmado.
