MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
"El deporte de élite cansa, cuando uno intenta ser el mejor del mundo en algo, es muy intenso, es una dedicación plena, toda tu vida gira en torno a eso. Tienes que saber buscar un equilibrio y rodearte de la gente adecuada y hacerte preguntas a ti mismo, si lo haces por rutina, si realmente te gusta", apuntó Gómez Noya sobre la alta competición en una entrevista a Europa Press.
En su caso, después de ser cinco veces campeón mundial, plata en los Juegos de Londres y cuatro veces campeón de Europa, recalcó que el triatlón es lo que le gusta hacer. "Tengo días mejores y días peores, pero de momento disfruto de lo que hago, me siento competitivo todavía y sé que un día lo dejaré y no pasa nada", expresó.
"Puede que el deporte de alta competición no sea demasiado sano. Siempre digo que es bastante más sano que el que lleva una vida desordenada y sale todos los fines de semana. Quizá lo ideal sería hacer deporte con menos intensidad, pero es nuestra profesión. También cuidamos muchos más detalles que la gente normal. Está claro que es mejor vida que la vida al uso de salir por ahí de fiesta", comentó el gallego respecto a su estilo de vida, que "no variaría demasiado" si se retirara.
Sin embargo, a pesar del cansancio y la frustración que puede aparecer, por momentos, en una carrera "tan larga", el punto positivo es que "te quita estrés". "Si consigo ganar carreras y grandes objetivos, estupendo, y si no, estaré contento con la carera que tengo", argumentó. "Tengo menos presión que hace diez años, cuando vas a unos Juegos por primera vez y quieres conseguir una medalla. Ahora lo hago porque quiero, me sigue apeteciendo y sigo con ganas e ilusión", celebró.
"La experiencia es un grado a la hora de conocerte, a ser más eficaz, saber cómo afrontar las competiciones. Esa es la parte positiva, pero la negativa es que el cuerpo está mejor con 25 años que con 40, pero no se puede tener todo", bromeó.
Gómez Noya comenzó con buen pie el inicio de la temporada 2022, con una importante victoria en el Ironman 70.3 de Pucón (Chile), un triunfo que ponía los cimientos de una buena preparación con el Mundial de Ironman de Kona (Hawái) en el horizonte.
Sin embargo, el COVID-19 se cruzó en su camino en el mes de abril, un día antes de viajar a St. George (Utah), prueba del Campeonato del Mundo. "El momento fue bastante inoportuno, ya has hecho la preparación tal y como estaba en la planificación, no te has saltado ni un día, y te pilla justo antes. Es un poco más frustrante", explicó.
"PENSAR EN OTROS JUEGOS NO ES ALGO QUE ME MOTIVE EN EXCESO"
"Fue más duro mentalmente, sobre todo después. Porque cuando ya has superado la enfermedad y das negativo, notas que todavía hay algo que no está bien, no te sientes tú y no sabes si va a ser una semana o diez meses, esa incertidumbre es difícil de gestionar mentalmente", relató sobre la enfermedad y su posterior recuperación.
Este infortunio en el momento clave, que recuerda a su fractura en el brazo a semanas de Río 2026, le llevó a tomar la decisión de no competir en el Mundial de Ironman en Kona (Hawái), su objetivo principal para esta temporada. "Claro que duele, pero hay otras pruebas interesantes que también me motivan. Si me dices que solo está Kona y es o Kona o nada, hubiese sido más duro. Pero está el 70.3, otras pruebas PTO, con otros Ironman que puedo hacer, se maquilla un poco ese mal menor", se resignó.
Finalmente, Gómez Noya, plata olímpica en Londres 2012, dio por "bastante cerrado" el capítulo de los Juegos. "Es complicado dejar la distancia olímpica, porque es donde te sientes cómodo, es lo que dominas. Pero ya no tenía esa ilusión, pensar en otros Juegos no es algo que me motive en exceso, ya he estado en muchos. Ahora me motiva hacer larga distancia", sentenció.