MADRID, 13 (EUROPA PRESS)
Los servicios de Emergencia también han constatado cuantiosos daños materiales: más de 2.500 viviendas han quedado completamente destruidas y otras 500 se encuentran parcialmente dañadas.
Las autoridades del estado han lanzado una petición de socorro a las organizaciones humanitarias y al Gobierno central sudanés con el objetivo de brindar el apoyo necesario para enfrentar la situación.
Según estimaciones de Naciones Unidas, más de 100.000 personas se vieron afectadas por las fuertes lluvias e inundaciones en Sudán el año pasado.
Las autoridades sudanesas se vieron obligadas a declarar en 2020 el estado de emergencia nacional por un período de tres meses por culpa de las lluvias torrenciales, que afectaron a más 650.000 personas y destruyeron, total o parcialmente, más de 110.000 viviendas.