LONDRES (AP) — El técnico de Chelsea Thomas Tuchel se expone a sanciones a raíz de los incidentes en otro encendido partido contra Tottenham en la Liga Premier.
Tuchel también podría verse en problemas por sus críticas contra el árbitro.
La atención tras el empate 2-2 el domingo en Stamford Bridge se enfocó en la bronca entre Tuchel y su colega Tottenham Antonio Conte durante y después del partido. Ambos entrenadores fueron expulsados tras un tenso apretón de manos cuando sonó el silbatazo final. Se da por descontado que no podrán dirigir desde la banca en los próximos compromisos de sus equipos.
Sin embargo, Tuchel también arremetió contra el árbitro Anthony Taylor en la rueda de prensa tras el encuentro. Dijo que “quizás sea mejor que Taylor no vuelva a pitar en partidos de Chelsea”.
A un pregunta sobre la opinión que comparten algunos de los hinchas de que Taylor tiene antecedentes de decisiones desfavorables contra Chelsea, Tuchel respondió: “No creo que únicamente los aficionados piensen eso. Puedo asegurarles que todo el vestuario, cada persona, piensa igual”.
La Federación Inglesa de fútbol abriría un expediente disciplinario por esos dichos y el mismo Tuchel reconoció la posibilidad de ser “castigado” por pronunciarse en contra de Taylor.
Tuchel se indignó porque una aparente falta de Rodrigo Bentancur, el volante uruguayo de Tottenham, sobre el atacante Kai Havertz no fue señalada previo al primer gol de los visitantes.
También quedó sorprendido porque el Cristian Romero, el zaguero central argentino de Tottenham, no fue penalizado por agarrar del pelo a Marc Cucurella de Chelsea en un tiro de esquina ejecutado previo al tanto de Harry Kane que decretó el empate definitivo en el sexto minuto de la prolongación.
“Ha sido una tremenda malinterpretación de las situaciones”, dijo el estratega alemán.
En tanto, Conte recurrió a su cuenta de Instagram para echarle más leña al fuego al pleito con Tuchel, el cual estalló cuando Tottenham lo empató 1-1. El técnico italiano celebró el gol de Pierre-Emile Højbjerg a los 68 minutos acercándose a Tuchel para gritárselo en la cara, lo cual provocó forcejeos entre los integrantes de los auxiliares técnicos y suplentes.
Después que sonó el silbatazo final, Tuchel y Conte se saludaron en el campo, pero Tuchel no soltó la mano y le recriminó a Conte que le mirara a los ojos. Volvieron a gritarse a la cara.
En un mensaje en su cuenta de Instagram, Conte incluyó una foto de Tuchel corriendo frente a él para celebrar el gol de Reece James que transitoriamente puso a Chelsea arriba 2-1. “Por suerte que no te ví .. hacerte tropezar hubiersa sido bien merecido", escribió Conte, añadiendo tres emojis con la cara que llora de risa.