MADRID, 24 (EUROPA PRESS)
"Dos países unidos por la historia, ligados por el corazón. Doscientos años de independencia, una eternidad en libertad. ¡Dios, patria, familia! ¡Viva Portugal! ¡Viva o Brasil!", ha clamado Bolsonaro durante la recepción del corazón.
El corazón llegó desde Porto en una urna dorada y fue recibido con honores militares tras aterrizar en la base área de Brasilia.
Es la primera vez que el órgano sale de Portugal y desde el jueves será exhibido en el Ministerio de Asuntos Exteriores hasta el 5 de septiembre, con motivo de la conmemoración de los 200 años de la independencia de Brasil.
El 8 de septiembre, un día después de las celebraciones por la independencia, pondrá de nuevo rumbo a Portugal, donde volverá a ser guardado en la sala principal de la Iglesia de la Hermandad de la Lapa, en Porto, donde Pedro I pidió que se conservará según el testamento dejado a su muerte.
Si bien llegada de los restos del monarca a suelo brasileño ha sido avalada desde un punto de vista técnico por el Instituto Médico Legal de la Universidad de Porto y político tras una votación en la Cámara Municipal de la ciudad, en Brasil ha generado cierta controversia por los riesgos al corazón y el dinero invertido.