MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
En un informe, a petición del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, se reclama la imposición de sanciones contra los intereses económicos de las Fuerzas Armadas y embargos armamentísticos como vía para limitar la represión de la disidencia en el país asiático. Plantea, por ejemplo, límites al acceso de divisa extranjera.
Naciones Unidas considera que la junta ha incurrido en graves abusos desde que tomó el poder, "reprimiendo y aterrorizando" a la población birmana y detecta lagunas significativas a la hora de limitar el margen de actuación de las actuales autoridades. Así, ha advertido de que varios países siguen suministrando armamento.
El informe plantea que las sanciones se adopten teniendo en cuenta a la sociedad civil y al "movimiento democrático", para calibrar su impacto y que no provoquen efectos indeseados sobre la población birmana, que ya están sufriendo las consecuencias del actual régimen autoritario.
La junta ha impulsado los presupuestos en Defensa a costa de recortes en educación, sanidad y otros servicios considerados básicos, en un contexto en que los niveles de pobreza se han duplicado y más de la mitad de los niños en edad escolar llevan dos cursos sin asistir a clase.