Lo hizo, la NASA logró desviar un asteroide luego de impactarlo con la sonda espacial Dart, en un exitoso experimento y ahora mantendrá la vigilancia para verificar si de verdad el asteroide modificó su órbita.
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En el primer experimento de su tipo, la NASA golpeó a un asteroide pequeño e inofensivo a millones de kilómetros de distancia a fin de desviarlo.
Una sonda espacial llamada Dart se dirigió este lunes hacia el asteroide para estrellarse directamente contra él a 22 mil 500 kilómetros por hora. El impacto bastó para empujarlo hacia una órbita ligeramente más baja alrededor de otro asteroide de mayor tamaño a fin de mostrar que, si una enorme roca espacial alguna vez se dirigiera hacia nuestro planeta, tengamos una oportunidad de defendernos desviándola.
“Esto es material de libros de ciencia ficción y episodios cursis de ‘StarTrek’ de cuando era niño, y ahora es real”, dijo el jueves el científico Tom Statler, del programa de la NASA.
Cámaras y telescopios observarán la colisión, pero habrá que esperar días o incluso semanas para averiguar si de verdad modificó la órbita. La prueba de defensa planetaria de 325 millones de dólares comenzó con el lanzamiento de Dart en el otoño pasado.
ASTEROIDE OBJETIVO
El asteroide en el que se puso la mira se llama Dimorphos y se encuentra a unos 9.6 millones de kilómetros (7 millones de millas) de la Tierra. Es bastante chico, de unos 160 metros (525 pies) de diámetro, y acompaña a un asteroide de mayor tamaño, Didymos, que en griego significa gemelo y mide unos 780 metros (2 mil 500 pies).
Descubierto en 1996, Didymos gira tan rápido que los científicos creen que se le desprendió material con el que se formó su luna, Dimorphos, que lo orbita a menos de 1.2 kilómetros (una milla).
“Esto realmente se trata del desvío de un asteroide, no de una alteración”, explicó Nancy Chabot, científica planetaria y directora del equipo de la misión en el Laboratorio de Física Aplicada de la Universidad Johns Hopkins, que administra la iniciativa. “Esto no va a destruir al asteroide. No va a convertirlo en un montón de fragmentos”, señaló. En lugar de ello, el impacto generará un cráter de decenas de metros y arrojará un millón de kilogramos (unos dos millones de libras) de rocas y polvo hacia el espacio.
La NASA insiste en que no hay ninguna posibilidad de que alguno de los asteroides suponga un peligro para la Tierra ahora ni en el futuro. Es por ello que se les escogió.
DART, EL IMPACTADOR
El laboratorio Johns Hopkins adoptó un enfoque minimalista en el desarrollo de Dart, abreviatura en inglés de Double Asteroid Redirection Test (Prueba de Redireccionamiento de un Asteroide Binario), ya que en esencia se trata de un ariete que terminará totalmente destruido.
Tiene un solo instrumento: una cámara utilizada para navegar, seleccionar el objetivo y registrar su última acción. Dimorphos, que se cree es básicamente una pila de escombros, aparecerá como un punto de luz una hora antes del impacto, y se verá cada vez más grande en las imágenes que la cámara transmitirá a la Tierra.
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Los administradores confían en que que Dart no se estrellará por error contra Didymos, de mayor tamaño. El sistema de navegación de la sonda está diseñado para que la nave distinga entre ambos asteroides y, en los últimos 50 minutos, se dirija hacia el más pequeño.
La sonda, que tiene el tamaño de una máquina expendedora y un peso de 570 kilogramos (mil 260 libras), colisionará contra el asteroide de 5 mil millones de kilogramos (11.000 millones de libras).
“A veces decimos que es como estrellar un carrito de golf a gran velocidad contra una Gran Pirámide”
— Nancy Chabot, científica planetaria y directora del equipo de la misión en el Laboratorio de Física Aplicada de la Universidad Johns Hopkins
SALVANDO A LA TIERRA
El pequeño Dimorphos completa una vuelta alrededor del gran Didymos cada 11 horas y 55 minutos. Con el impacto de Dart el tiempo se calcula que se reducirá en unos 10 minutos. Aunque la colisión sea evidente de inmediato, podría tomar algunas semanas o más para verificar la alteración en la órbita de la luna menor.
Los observatorios darán seguimiento al par de asteroides en su órbita alrededor del Sol para ver si Dart alteró la órbita de Dimorphos. En 2024, una sonda europea llamada Hera seguirá la travesía de Dart para medir los resultados del impacto.
Aunque el empujón deseado debería modificar ligeramente la posición del asteroide menor, eso resultará en un cambio mayor con el tiempo, según Chabot.
“Así que si uno hiciera esto para la defensa del planeta, habría que hacerlo con una anticipación de cinco, 10, 15, 20 años para que esta técnica funcione”, señaló.
ABUNDANTES MISIONES A ASTEROIDES
El planeta Tierra se encuentra en una búsqueda de asteroides. La NASA recogió cerca de 450 gramos (una libra) de restos del asteroide Bennu y los trae hacia la Tierra. La carga debe llegar en septiembre próximo. Japón fue el primero en traer muestras de asteroides al lograr la hazaña un par de ocasiones. China confía en seguir los pasos con el envío de una misión en 2025.
La sonda Lucy de la NASA, en tanto, se dirige hacia asteroides próximos a Júpiter tras su lanzamiento el año pasado. Otra sonda, Near-Earth Asteroid Scout (Buscador de Asteroides Próximos a la Tierra), se encuentra en el nuevo cohete lunar de la NASA que aguarda el despegue; utilizará una vela solar para pasar cerca de un asteroide de menos de 18 metros (60 pies) el año entrante.
En los próximos años, la NASA también planea enviar al espacio un telescopio que hará un censo para identificar asteroides difíciles de encontrar y que pudieran representar un peligro.
Una misión para asteroides continúa varada mientras una junta revisora independiente evalúa su futuro. La sonda Psyche de la NASA debía haber sido enviada al espacio este año hacia un asteroide de alto contenido metálico que se encuentra entre Marte y Júpiter, pero el equipo no pudo probar a tiempo el software de vuelo.
CINTAS DE HOLLYWOOD
Durante décadas Hollywood ha producido decenas de películas sobre asteroides asesinos, entre ellas “Armageddon” de 1998, en la que Bruce Willis fue llevado a Cabo Cañaveral para hacer el rodaje, y “Don’t Look Up” del año pasado, en la que Leonardo DiCaprio tiene el papel principal en un elenco estelar.
Lindley Johnson, responsable de defensa planetaria de la NASA, dice haber visto todas desde “Meteor” de 1979, su favorita personal “ya que Sean Connery me interpretó”. Aunque algunas de las cintas de ciencia ficción son más precisas que otras, según hizo notar, el entretenimiento siempre se impone.
La buena noticia es que parece no haber peligro alguno para el próximo siglo, sin amenazas conocidas. De lo contrario “sería como en las películas, ¿verdad?”, dijo el jefe de misiones científicas de la NASA, Thomas Zurbuchen.
Sin embargo, lo preocupante son las amenazas desconocidas. Se ha confirmado la ubicación de menos de la mitad de los objetos de 140 metros (460 pies), con millones de objetos más pequeños pero todavía peligrosos aún desplazándose a toda velocidad.
“Estas amenazas son reales y lo que hace especial a este tiempo es que podemos hacer algo frente a ellas”, dijo Zurbuchen.
No al destruir un asteroide como lo hizo el personaje de Willis —eso sería un recurso de último minuto_, o rogando a los jefes de gobierno que adopten medidas como hizo en vano el personaje de DiCaprio. Si el tiempo lo permite, la mejor táctica sería desviar de nuestra trayectoria al asteroide amenazante, como se hará con el experimento de Dart.
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