MADRID, 29 (EUROPA PRESS)
El conjunto de Natalia Arroyo llegaba con vida a la capital bávara en busca de la 'machada' de levantar el 0-1 de la semana pasada en el Reale Arena, pero de nuevo se topó con la mayor experiencia y fortaleza de su rival, implacable en los primeros 45 minutos donde dejó sin opciones a las realistas.
La entrenadora catalana apostó de nuevo por un once sin Amaiur Sarriegi para buscar una remontada que se puso más cuesta arriba muy pronto. El Bayern salió con mucha fuerza y controló el partido, topándose con Elena Lete Para, que le negó el 1-0 a Zadrazil y a otra vez una muy activa Dallmann.
El conjunto local apretaba mucho y apenas dejaba maniobrar a la Real, incapaz de acercarse con peligro a la portería Grohs y que a los 18 minutos encajaba el primer tanto, obra de Dallmann que no perdonó una gran pared con Lohmann y tras un despeje algo errático de Ana Tejada.
Sin tiempo para que las visitantes reaccionasen, llegó el 2-0 cuatro minutos después, otra vez de Dallmann, aunque desvío de Specht y en una posición algo dudosa. El billete se ponía muy caro para una Real que no probó los guantes de Grohs hasta el minuto 34, con un centro inocente de Jensen, y que se vio prácticamente fuera cuando Schuller hacía el 3-0 al filo del descanso tras una buena jugada de Lohmann.
De todos modos, antes de enfilar el camino a vestuarios, el conjunot donostiarra consiguió estrenar su casillero de goles en la eliminatoria por medio de Jensen, que envió a la red un pase de una Nerea Eizagirre muy bien controlada en esta ocasión durante todo el partido.
Este tanto dio algo de fuerza a una Real donde Natalia Arroyo probó con cambios para meter más ímpetu. Su equipo respondió y puso más empeño en los segundos 45 minutos, donde el Bayern tampoco apretó tanto y jugó más con el resultado y con aprovechar algún contragolpe.
El actual subcampeón de la Liga F tuvo una buena opción al inicio por la defensa se cruzó vitalmente ante Jensen, pero se quedó ahí y no logró encontrar el camino hacia la portería para meter un gol que le diese vida, ni siquiera con la entrada a falta de algo más de 20 minutos de Amaiur Sarriegi.
Las locales aguantaron bien y aunque no se asomaron con demasiado peligro, dieron más trabajo en los compases finales a Lete, de nuevo acertada para frenar el mano a mano con Laurent, en lo que fue la ocasión más clara del Bayern en la segunda mitad.