MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
"Aliviado porque los colegas humanitarios hayan podido rotar de forma segura y salir de Tigray, en Etiopía, tras varias semanas de suspensión", ha destacado el secretario general adjunto de la ONU para Asuntos Humanitarios, Martin Griffiths, a través de su cuenta en la red social Twitter.
Así, ha afirmado que son "noticias alentadoras" y ha mostrado su deseo de que "los próximos movimientos tengan lugar sin problemas", al tiempo que ha pedido al Gobierno etíope y al Frente Popular para la Liberación de Tigray (TPLF) "retomar las negociaciones".
Griffiths ha reclamado además a las partes que "protejan a todos los civiles", que "garanticen la seguridad del personal humanitario y su acceso seguro a personas en situación de necesidad" y que "permitan el reinicio de un paso rápido y sin restricciones a los suministros humanitarios en la región".
La guerra ha sufrido un recrudecimiento durante las últimas semanas tras el estallido de nuevos combates en agosto después de cinco meses de tregua humanitaria pactada entre las partes. El TPLF ha denunciado además una ofensiva a gran escala del Ejército eritreo en apoyo a las fuerzas etíopes.
El conflicto en Etiopía estalló tras un ataque del TPLF contra la principal base del Ejército, situada en Mekelle, tras lo que el primer ministro etíope, Abiy Ahmed, ordenó una ofensiva contra el grupo tras meses de tensiones a nivel político y administrativo. En la actualidad hay en vigor una "tregua humanitaria", si bien ambas partes se han acusado de impedir la entrega de ayuda.
El TPLF acusa a Abiy de azuzar las tensiones desde su llegada al poder en abril de 2018, cuando se convirtió en el primer oromo en acceder al cargo. Hasta entonces, el TPLF había sido la fuerza dominante dentro de la coalición que gobernó Etiopía desde 1991, el Frente Democrático Revolucionario del Pueblo Etíope (EPRDF), sustentada en las etnias. El grupo se opuso a las reformas de Abiy, que consideró como un intento de socavar su influencia.