MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
Meloni, que por ahora guarda silencio sobre la composición de su hipotético gabinete, está obligada a repartir puestos con sus socios de la Liga, encabezada por Matteo Salvini, y Forza Italia, el partido fundado por Silvio Berlusconi. Todas las partes apelan a la prudencia informativa, ante unos rumores cada vez más recurrentes.
El jefe del grupo parlamentario de Hermanos de Italia, Francesco Lollobrigida, ha descartado a su llegada a la reunión que esté previsto examinar el reparto de carteras. "Si Meloni recibe el encargo del presidente (Sergio) Matarella de formar Gobierno, pensará en detalle quiénes son las mejoras personas para ocupar puestos de responsabilidad", ha señalado.
El vicepresidente de la Cámara de Diputados, Fabio Rampelli, ha alegado que "las cosas van muy bien" y ha evitado valorar un posible veto para que Salvini no retorne al Ministerio del Interior. La Liga reivindica esta cartera como cargo "natural" de su líder, en palabras del ministro Giancarlo Giorgetti, según la agencia de noticias AdnKronos.
Meloni, por su parte, defendería su derecho a nombrar a gente de su elección en carteras de peso como Defensa y Exteriores, si bien para este último Ministerio suena también entre los candidatos el expresidente de la Eurocámara Antonio Tajani, miembro de Forza Italia.
También ha crecido el debate en torno a la posible incorporación de perfiles técnicos, principalmente en áreas de economía, aunque miembros los tres partidos aliados han deslizado en estos últimos que será un gabinete con marcado peso político y que la incorporación de personas ajenas será la excepción y no la norma.
