MADRID, 6 (EUROPA PRESS)
Toda la polémica que surgió en torno a la figura del seleccionador nacional Jorge Vilda en la anterior concentración se agravó tras el final de esta con un correo electrónico de carácter privado de 15 futbolistas, entre ellas Patri Guijarro, Aitana Bonmatí, Mapi León, Ona Batlle, Lucía García, Laia Aleixandri, Sandra Paños o Amaiur Sarriegi, que solicitaban a la RFEF no ser convocadas para este parón de octubre por el daño que les estaba causando la situación reinante.
Lejos de haber una tregua o algún tipo de acercamiento, la RFEF mostró de nuevo su total y firme apoyo al técnico, el cual finalmente no citó a ninguna de esas jugadoras, además de la capitana Irene Paredes ni a la delantera Jenni Hermoso, para los dos potentes amistosos ante Suecia y, la semana que viene, ante los Estados Unidos.
Vilda también pareció cerrar casi de forma definitiva la puerta a estas 17 jugadoras y dejó claro que se encontraba con fuerzas para crear "una nueva selección", que en esta convocatoria cuenta todavía con ocho de las que estuvieron en la pasada Eurocopa: la portera Misa Rodríguez, las defensas Ivana Andrés y Olga Carmona, las centrocampistas Tere Abelleira e Irene Guerrero, y las delanteras Athenea del Castillo, Esther González y Marta Cardona.
De todas ellas, Carmona, Abelleira, Del Castillo y González fueron titulares en los cuartos ante Inglaterra. Precisamente, la extrema cántabra del Real Madrid será uno de los focos de atención por el gran estado de forma en el que se encuentra.
Además, han regresado jugadoras que ya tienen experiencia con la selección como Claudia Zornoza, Maite Oroz o Alba Redondo, nuevas caras para ver como Ane Azkona, Laia Codina y Nuria Rábano, y un retorno como el de Andrea Sánchez Falcón, una jugadora lastrada en su progresión por las lesiones. Por lesión, se cayeron dos campeonas del mundo Sub-20 como Salma Paralluelo y Ana Tejada, y otra de la cita continental como Sheila García.
Con estos nuevos mimbres, con mucha menor experiencia competitiva, Vilda iniciará una reconstrucción para formar una nueva España para la que pide paciencia y que ahora mismo parece ser la destinada a competir el año que viene en el Mundial de Australia y Nueva Zelanda si las aguas no vuelven a su cauce, todavía a la espera de saber qué pasará con la gran estrella del equipo, Alexia Putellas, lesionada, pero que mostró su apoyo al comunicado que ofrecieron posteriormente sus compañeras.
España ya no tendrá partidos oficiales hasta esa cita después de cerrar en septiembre su fase de clasificación para esta Copa del Mundo con victorias claras sobre Hungría (3-0) y Ucrania (5-0). La primera prueba para el nuevo proyecto será una Suecia que pasa por ser una de las mejores selecciones del mundo, semifinalista de la pasada EURO, actual subcampeona olímpica y número tres del ranking FIFA.
Las suecas, terceras también en el pasado Mundial de Francia, también sellaron sin problemas su billete mundialista al encabezar su grupo cediendo sólo un empate ante la República de Irlanda, y llegan a Córdoba con casi todas sus figuras, sobre todo en la parte delantera.
Peter Gerhardsson cuenta arriba con mucho peligro y gol con conocidas como las exmadridistas Kosovare Asllani y Sofia Jakobsson, a las que se une Stina Blackstenius, delantera del Arsenal. También sobresale el poderío por la banda de la blaugrana Fridolina Rolfo en un combinado que exigirá un fuerte despliegue físico.
