JERUSALÉN (AP) — La policía israelí detuvo al menos a tres palestinos el domingo en relación con un tiroteo mortal en un control de seguridad en Jerusalén, mientras las fuerzas de seguridad buscaban al supuesto agresor.
El tirador disparó el sábado contra un control militar en Jerusalén Este y mató a una soldado israelí e hirió a otros tres, uno de ellos de gravedad. El ejército israelí identificó a la soldado fallecida como Noa Lazar, de 18 años.
El ataque continuaba con el peor brote de violencia en la región en siete años. También ocurrió el día antes de que Israel comenzara las celebraciones del feriado de Sukkot, una semana en la que decenas de miles de judíos visitan la ciudad sagrada.
Un gran contingente de policías, soldados y agentes del servicio de seguridad Shin Bet participaban en la operación para detener al agresor palestino, según la policía.
El primer ministro de Israel, Yair Lapid, ofreció sus condolencias a la familia de Lazar. “No guardaremos silencio y no descansaremos hasta que llevemos ante la justicia a los abominables asesinos”, dijo.
El ataque ocurrió horas después de la muerte de dos adolescentes palestinos durante una redada militar israelí en la ocupada Cisjordania. El día anterior, otros dos adolescentes palestinos de 14 y 17 años murieron por fuego israelí en incidentes separados en Cisjordania.
Los grupos de derechos acusan a las fuerzas israelíes de emplear una fuerza excesiva con los palestinos, especialmente hombres jóvenes, sin rendir cuentas. El ejército alega que lidia con situaciones complejas y peligrosas.
Israel capturó Jerusalén Este, junto con Cisjordania y la Franja de Gaza en la guerra de 1967 y se anexionó la zona en un movimiento sin reconocimiento internacional. Considera toda la ciudad, incluido Jerusalén Este, que acoge los lugares de culto más importantes de la urbe, como su capital. Los palestinos reclaman Jerusalén Este como capital de un estado futuro con Cisjordania y la Franja de Gaza.