MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
"Por supuesto que existe el derecho a la huelga, pero en algún momento el país también debe poder funcionar. Lo que es seguro es que hay algunos sindicalistas que a veces dan la impresión de estar por encima de sobre los intereses de millones de franceses", ha apuntado Attal en una entrevista en la cadena Europe 1.
A pesar de los acuerdos, "hay un sindicato que sigue con el bloqueo". "Eso me parece incomprensible", ha indicado. Para Attal se trata de "una perturbación del orden público".
Además, Attal ha defendido las medidas del Gobierno. "Hemos presionado muy fuerte a empresas y sindicatos para que se sentaran a la mesa. (La primera ministra) Elisabeth Borne se pasó la semana al teléfono o en reuniones con líderes de empresa y sindicatos. Tomamos las medidas necesarias para mejorar la situación haciendo circular más camiones importando combustible de Bélgica", ha relatado.
CRÍTICAS AL EJECUTIVO
Mientras, la dirigente opositora Marine Le Pen ha señalado al Gobierno porque "no controla nada y no se anticipa nunca". "Es el Gobierno el que debería haber empujado a Total, dados sus resultados excepcionales, a negociar para obtener un aumento salarial", ha argumentado.
"El problema de este gobierno es que siempre es culpa de los demás", ha afirmado Le Pen durante su intervención en un programa de la televisión BFMTV. Le Pen ha defendido así la necesidad de gravar los beneficios de estas empresas porque si no se hace "crea un sentimiento de injusticia".
Así, Le Pen ha abogado por convocar "una gran conferencia sobre salarios", afectados por la elevada inflación, e intervenir en mercados como el de la electricidad.
Precisamente este domingo se celebra en París una gran manifestación contra la carestía de la vida organizada por la Nueva Unión Popular Ecologista y Social (NUPES), que aglutina a la izquierda política francesa.