KIEV, Ucrania (AP) — El presidente de Alemania llegó a Kiev el martes en su primera visita a Ucrania desde el inicio de la invasión rusa, al tiempo que varios países occidentales estudian un plan masivo para reconstruir Ucrania cuando termine la guerra.
El presidente Frank-Walter Steinmeier declaró tras llegar a la capital ucraniana que “era importante para mí, en esta fase de los ataques aéreos con drones, misiles de crucero y proyectiles, enviar una señal de solidaridad a los ucranianos”.
Más tarde debió ingresar momentáneamente a un refugio antiaéreo después de que sonara una sirena antiaérea, alertando de un posible ataque, según los medios locales.
Ocho meses de cañoneos por parte de las fuerzas del Kremlin han arruinado viviendas, edificios públicos y la red eléctrica. El Banco Mundial calcula que los daños a Ucrania suman hasta ahora unos 350.000 millones de euros (345.000 millones de dólares).
El presidente alemán, cuyo cargo es principalmente ceremonial, finalmente pudo viajar al país en su tercer intento.
Tenía previsto visitar el país en abril con sus homólogos de Polonia y países bálticos, pero dijo que su presencia “aparentemente (...) no era deseada en Kiev”. Steinmeier ha sido criticado en Ucrania por su supuesta cercanía con Rusia durante su etapa como ministro de Relaciones Exteriores. La semana pasada, se aplazó el viaje que tenía planeado por motivos de seguridad.
La visita de Steinmeier se produce mientras los ucranianos se preparan para enfrentar un invierno con menos energía eléctrica y medios de calentamiento luego de los constantes ataques rusos contra su infraestructura en las últimas semanas.
Los ciudadanos de la ciudad sureña de Mykolaiv hicieron fila el martes para recibir agua y otros bienes básicos mientras las fuerzas ucranianas avanzaban hacia la cercana ciudad de Jersón, ocupada por Rusia.
Entretanto, el presidente ruso, Vladimir Putin, tomó medidas para abordar la escasez en su propio país a medida que la guerra agota sus recursos militares y se extiende más de lo esperado.
Putin presidió el martes un nuevo comité diseñado para acelerar la entrega de armas y suministros para las tropas rusas en Ucrania. Enfatizó la necesidad de “acelerar el paso en todas las áreas”.
Los informes noticiosos rusos han reconocido que muchos de los convocados como parte de una movilización de 300.000 reservistas ordenada por Putin no han recibido suministros básicos, como botiquines médicos y chalecos antibalas, y que tuvieron que conseguirlos por su cuenta.
Mientras tanto, en Berlín, los líderes de la Unión Europea reunieron a expertos para comenzar a trabajar en un “nuevo Plan Marshall” para la futura reconstrucción de Ucrania, en referencia al plan patrocinado por Estados Unidos que ayudó a reactivar las economías de Europa Occidental después de la Segunda Guerra Mundial.
El canciller alemán, Olaf Scholz, dijo que la reunión busca analizar “cómo asegurar y cómo mantener el financiamiento de la recuperación, reconstrucción y modernización de Ucrania en los próximos años y décadas”.