ROMA, 31 (EUROPA PRESS)
Tal y como ha informado el secretario del organismo del Vaticano encargado de tutelar a la infancia frente a los abusos, el sacerdote Andrew Small, los miembros están analizando la posición de la sección disciplinaria del Dicasterio para la Doctrina de la Fe para promover mayor transparencia y ofrecer una información más completa a las víctimas sobre los avances de los procesos judiciales que les afectan.
En un encuentro con la prensa acreditada en el Vaticano, Small ha asegurado que su compromiso "con las víctimas supervivientes pasa por el reconocimiento del mal que se les hizo; primordial que sean escuchados y creídos".
En este sentido, ha considerado que para muchas víctimas ver que el abusador o agresor "no tiene ninguna sanción es también muy doloroso". "Las víctimas se sienten comprensiblemente confundidas o molestas cuando no se les informa de las medidas adoptadas por la iglesia contra un delincuente acusado", ha lamentado.
El caso concreto del obispo emérito de Créteil (Francia), Michel Santier, condenado por un tribunal eclesiástico por abusos espirituales con fines sexuales cometidos en la década de 1990, cuya sanción salió en la prensa sin haberse informado previamente a las víctimas, causó conmoción en Francia porque él había asegurado que se retiraba por cuestiones de salud y nadie contradijo sus excusas.
Los obispos de ese país pidieron entonces una reflexión sobre la necesidad de una mayor transparencia en la comunicación de estas sanciones.
En este sentido, Small ha señalado que la Comisión Pontificia para la Protección de los Menores no tiene ninguna competencia en investigaciones individuales y, por lo tanto, no sigue los procedimientos disciplinarios.
La Comisión de Menores se reunió en el Vaticano a finales de octubre y sentó las bases para elaborar un informe anual sobre los compromisos de la Iglesia en este ámbito. Según ha adelantado Small, el Vaticano todavía tiene que encontrar una fórmula de transparencia que respete las leyes locales de todos los países que protegen la reputación de alguien que no es culpable por la vía civil pero que, en cambio, puede haber violado las leyes del Vaticano.
"Si la iglesia no puede resolver eso, no solo será malo desde el punto de vista institucional, sino que será siempre doloroso para las víctimas, que son la fuente y la cumbre del enfoque de la comisión", ha asegurado Small.
El Papa reorganizó la Curia Romana en la nueva Constitución Apostólica, 'Praedicate Evangelium', y vinculó el organismo para la protección de la infancia a la sección disciplinaria del Dicasterio para la Doctrina de la Fe.