DETROIT (AP) — La familia de Porter Burks, un hombre negro muerto a tiros por la policía en Detroit, demandó a la ciudad por 50 millones de dólares, anunció el martes su abogado.
Cinco policías son nombrados también en la demanda por homicidio culposo presentada por el abogado Geoffrey Fieger. La demanda argumenta negligencia grave y asalto con agresión, entre otras cosas.
La muerte de Burks el 2 de octubre fue grabada por cámaras corporales de los policías, que le piden a Burks que deje caer el cuchillo que llevaba.
La policía acudió inicialmente a la escena en respuesta a una llamada sobre un hombre con un cuchillo que estaba sufriendo una crisis de salud mental. Los agentes hablaron con un hombre que se identificó como el hermano de Burks. El hombre les dijo que Burk había pinchado los neumáticos de su automóvil.
“Dejar caer el cuchillo, hombre. Vamos. Estás bien”, se escucha a un miembro del equipo de intervención en crisis de la policía decirle a Burks. “No estás en aprietos. ¿Puedes hablarme y soltar el cuchillo?
“No estás en aprietos, ¿ok?”, continúa diciendo el agente. “Solamente quiero ayudarte. Solamente quiero ayudarte, ¿ok? ¿Pudieras soltar el cuchillo por mí, por favor? Cualquier cosa que esté sucediendo, yo puedo ayudarte”.
Burks — que la policía dice padecía de esquizofrenia — fue baleado cuando se abalanzó hacia los agentes desde el medio de la calle.
Las autoridades policiales dicen que se hicieron 28 disparos en tres segundos. Burks fue alcanzado 19 veces, de acuerdo con el reporte de autopsia proveído el martes por Fieger.
La policía de Detroit conduce una investigación administrativa interna sobre el incidente y los agentes que dispararon contra Burks están de licencia administrativa. La policía estatal también está investigando y se espera que presente sus conclusiones ante el fiscal del condado Wayne.
El jefe de la policía James White dijo en una conferencia de prensa dos días después de la muerte de Burks que la crisis de salud mental en Detroit y el resto del país “es real”.
El 26 de junio, Burks fue ingresado en un hospital siquiátrico de Detroit tras ser hallado deambulando por su barrio “buscando pelearse con alguien”, dijo la policía. Se escapó dos días más tarde luciendo una bata de hospital y fue arrestado cuando corría entre el tráfico.