SANTIAGO (AP) — El presidente chileno Gabriel Boric anunció el miércoles que enviará al Congreso una propuesta de reforma al sistema de pensiones que supone el fin de las administradoras privadas, las impopulares AFP, a favor de un sistema mixto con participación de los trabajadores, el Estado y los empresarios.
Boric dio a conocer el anuncio en una transmisión televisada. Desde hace más de 15 años los chilenos esperan que haya una reforma, la cual se ha visto frustrada en distintos intentos de gobiernos anteriores.
“El actual sistema de pensiones está en crisis, y eso nadie lo pone en duda. Las pensiones de hoy no alcanzan para que nuestros padres, madres, abuelos, abuelas, sostengan una vida digna en su vejez, sin importar cuánto trabajaron durante su vida”, sostuvo el mandatario izquierdista.
El 72% de las pensiones que recibe la población son inferiores al salario mínimo, y uno de cada cuatro jubilados cobra una pensión que está por debajo de la línea de la pobreza, señaló en su discurso Boric, que también recordó que las administradoras de fondos de pensiones (AFP) —el sistema privado de pensiones obligatorio para los chilenos en la actualidad— obtienen utilidades “aunque los resultados y la rentabilidad de los fondos sean negativos”.
En lugar de ello, Boric propone un sistema de jubilaciones mixto basado “en los principios de la seguridad social”, en que existan contribuciones del Estado, empleadores (que pasarían a aportar de forma gradual hasta alcanzar un 6% frente a nada en la actualidad) y los trabajadores.
Esto tendría un gran impacto en relación a las pensiones actuales. En la actualidad, una persona que durante su vida laboral cotizó un sueldo de unos 425 dólares percibe una pensión de entre 275 y 285 dólares, pero si el Congreso aprueba la reforma de Boric pasaría a cobrar unos 415 dólares, es decir un 46% más para el hombre y un 52% más para la mujer, según expresó el mandatario.
El presidente señaló que los ahorros previsionales en cuentas individuales acumulados en la actualidad como en el futuro seguirían siendo de propiedad individual, heredables y “jamás expropiados, tal como funciona hoy”, para despejar cualquier “fantasma o noticia falsa”, recalcó. Además, el sistema “entregará libertad para elegir quién invertirá tus fondos de pensiones, opción que hoy día no existe”.
Las pensiones reconocerán el trabajo “en labores domésticas y de cuidados” que en Chile recaen principalmente en mujeres, señaló el mandatario, destacando que las mujeres no ven su trabajo reflejado en sus pensiones en la actualidad, que suelen ser más bajas que las de los hombres. “Se incrementará, de esta manera, la pensión en casos de maternidad”, manifestó.
Boric reconoció que la reforma planteada por su gobierno continúa el trabajo de las iniciadas en los segundos gobiernos de Michelle Bachelet (2014-2018) y Sebastián Piñera (2018-2022).
La reforma a las pensiones anunciada está condicionada a que se apruebe la reforma tributaria del presidente, que ha sido rechazada en el Congreso y sigue bajo discusión. Además, enfrenta el hecho de que el Congreso es el más dividido desde que Chile volvió a la democracia, y en él la coalición gobernante, Apruebo Dignidad, tiene la cantidad más baja de diputados y senadores de las últimas décadas.
Una parte de los diputados y senadores de Apruebo Dignidad se ha caracterizado por votar de forma reiterada en contra de varias de las propuestas de Boric.