MADRID, 14 (EUROPA PRESS)
Estas circunstancias obligaron por dos veces al aplazamiento de la obra, que se presentará finalmente del 18 al 27 de noviembre en el Teatro de la Zarzuela, institución que en su día le encomendó el encargo.
El compositor Tomás Marco ha explicado que la música y el libreto de esta obra se fueron escribiendo de forma simultánea y que, "por tanto, en ningún caso uno partió del otro sino que crecieron y culminaron como una única materia".
Asimismo, ha señalado que, como en la zarzuela tradicional, la obra se refiere a un tema de actualidad (la corrupción), "en cierta medida crítico, en parte desarrollado de forma humorística y en parte dramática y que pretende ser, evidentemente no igual que la zarzuela que se hacía en el XIX o principios del XX, pero sí el equivalente de lo que esta podría ser hoy día".
'Policías y ladrones' está dividida en números musicales cerrados, una "vuelta a la más pura esencia de la zarzuela, pero con el lenguaje de hoy". Su llegada se produce 41 años después del estreno de 'Fuenteovejuna' (1981), de Moreno Buendía, con el fin de "actualizar en cierta forma el género".
Para el compositor esta nueva producción es "una aventura artística que merecía la pena intentar", ya que se trata de subir a escena la corrupción política con la intención de mostrarla "como una farsa peculiar, sin la gravedad de una crítica demoledora, con el desparpajo y la ligereza de un argumento cuya intriga incorpora la tensión del 'suspense' en un despliegue de tipos, figuras, lances hipotéticos y absurdos verosímiles".
La nueva zarzuela, desarrollada con un tono tragicómico que se escora hacia el sarcástico escepticismo, cuenta en el foso con José Ramón Encinar y, frente a él, la Orquesta de la Comunidad de Madrid (Titular del Teatro).
El montaje está dirigido por Carme Portaceli y escenografía conceptual de Montse Amenós. "Estamos ante una zarzuela contemporánea, como los propios autores han convenido nombrarla, que el dramaturgo Álvaro del Amo ha escrito para hacernos reír y a la vez poder distanciarnos de ciertos comportamientos que nos hacen daño como seres humanos", han explicado desde la institución.
La directora de escena, Carme Portaceli, ha indicado que la representación será "una suerte de expiación". "Vamos a ver si, mediante la ironía, mediante un lenguaje escénico que nos permita representar el horror de esta historia como un fuego en la noche de San Juan, conseguimos crear distancia con eso que nos pesa como una losa y nos avergüenza cada día", ha concluido.