BUDAPEST, 21 (DPA/EP)
El ministro de Exteriores de Hungría, Peter Szijjarto, ha viajado este lunes a Rusia por segunda vez en las últimas seis semanas, ejemplo de la cercanía que sigue manteniendo con Moscú el Gobierno de Viktor Orbán, que se ha posicionado en contra de nuevas rondas de sanciones.
Szijjarto ha acudido a un foro de tecnología nuclear en Sochi, a orillas del mar Negro, con vistas a seguir avanzando en la construcción de dos nuevos reactores en la central atómica de Paks. El gigante ruso Rosatom se encargará de ampliar dichas instalaciones.
"Espero sinceramente que ningún país europeo impida esta inversión", ha dicho Szijjarto, que ha insistido en que la energía "es una cuestión de seguridad nacional, incluso de soberanía", según declaraciones difundidas por su departamento.
El jefe de la diplomacia húngara viajar en octubre a Moscú para asistir también a un evento sobre política energética y fue el único ministro de Exteriores de la UE en reunirse en septiembre con el titular ruso del ramo, Sergei Lavrov, en los márgenes de la Asamblea General de Naciones Unidas.