MADRID, 1 (EUROPA PRESS)
El Servicio Nacional de Atención Integral a Privados de la Libertad (SNAI) ha pedido en un comunicado que se declare nula la resolución emitida por el juez del Tribunal Constitucional Emerson Curipallo, quien el pasado lunes aceptó la medida cautelar a favor de Jorge Glas dejándolo en libertad.
Según el SNAI, esta orden judicial está motivado en la vulneración a la tutela judicial efectiva, la vulneración al debido proceso, la inobservancia del cumplimiento de la potestad estatal o la falta de motivación, según ha detallado en la misiva.
"Con estos argumentos y debido a que se evidenciaron vicios sustanciales en el proceso, este Servicio ha actuado conforme con lo que el Derecho le asiste y ha presentado una revocatoria, reservándose el derecho de actuar conforme a la normativa legal en estricto apego al Estado constitucional de derecho", ha aseverado el SNAI.
En tanto, el Ejecutivo ha presentado por segunda vez "un llamado de atención a la administración de Justicia", instando a que se revoque la decisión de puesta en libertad de Glas, como ya hizo en abril de este mismo año.
Glas salió el lunes de la Cárcel 4 de Quito tras la orden emitida por el juez de Santo Domingo de los Tsáchilas. En las afueras del recinto penitenciario fue sido recibido por un grupo de simpatizantes, quienes aplaudían, trataban de abrazarlo y gritaban consignas a su favor.
El que fue vicepresidente de Rafael Correa en 2013 y con Lenín Moreno en 2017 cumplía dos sentencias por cohecho y asociación ilícita. Además, tenía abierto un proceso por ser supuesto coautor de un delito de apropiación indebida de fondos públicos.
En abril de este mismo año otro juez dictaminó la puesta en libertad para Glas, aunque posteriormente fue destituido y detenido por cometer un supuesto delito de usurpación de funciones, ya que según el Poder Judicial ecuatoriano, habría actuado sin estar en la jurisdicción correspondiente para conceder un 'habeas corpus', informó 'El Universo'.
Más tarde, otra jueza rechazó el 'habeas corpus', obligando al exvicepresidente a ingresar de nuevo a prisión, donde debía cumplir dos penas de seis y ocho años.