MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
La decisión de Bolsonaro de cambiar a 25 días para que acaba su mandato al responsable de Cultura, que en su gabinete tiene estatus de Secretaría Especial, no así de ministerio, está motivada por la salida del anterior titular, Hélio Ferraz, rumbo al Gobierno de Tarcísio de Freitas en el estado de Sao Paulo.
Porciuncula, a quien se considera en Brasil un provocador de ultraderecha, es el séptimo secretario de Cultura desde que Bolsonaro es presidente y ha vuelto al Gobierno después de intentar sin éxito haber logrado un escaño como diputado.
Dentro de Cultura había sido secretario adjunto bajo el liderazgo de Mário Frias, aprovechando el cargo para apoyar los proyectos armamentísticos de un Bolsonaro que hizo de esto una de sus principales promesas en campaña, así como para desmantelar algunas de las principales políticas públicas de apoyo al sector.
Es frecuente ver al nuevo, aunque efímero, secretario de Cultura en redes sociales posando con armas de fuego de gran calibre junto a otros socios de Bolsonaro, e incluso con algunos de los hijos de este.