MADRID, 9 (EUROPA PRESS)
El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, ha afirmado que "no apoya la resistencia armada", si bien ha reseñado que "es algo que podría cambiar", ante el repunte de la violencia de los últimos meses, que ha dejado hasta el momento más de 20 israelíes muertos en diversos ataques y más de 210 palestinos muertos en operaciones de las fuerzas de seguridad israelíes.
"No apoyo la resistencia palestina armada, pero eso podría cambiar. Podría cambiar mañana, el día siguiente o en cualquier momento. Todo cambia", ha sostenido Abbas en una entrevista concedida a la cadena de televisión Al Arabiya, antes de recalcar que el pueblo palestino "está siendo oprimido, oprimido y oprimido hasta el punto en el que puedan estallar".
"Se está provocando que los palestinos pierdan la paciencia", ha advertido Abbas, que ha apoyado desde hace años la via de la resistencia pacífica para intentar forzar a Israel a acudir a la mesa de negociaciones para materializar la solución de dos estados, que contempla la creación de un Estado de Palestina en las fronteras de 1967, con Jerusalén Este como capital.
La renuncia a la violencia por parte del Frente de Liberación Palestina de Abbas en 1988 fue un paso importante de cara al reconocimiento por parte de Israel de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) como representante político y organismo con el que mantener negociaciones, si bien los contactos llevan varios años estancados.
Abbas, que ha condenado públicamente dos ataques terroristas ejecutados este año contra israelíes, ha defendido en su entrevista que "la coordinación de seguridad (con Israel) es parte de los acuerdos (bilaterales)", tal y como ha recogido el diario 'The Times of Israel'. "Cuando se trata de coordinación de seguridad, nuestra postura es combatir el terrorismo, sin importar dónde", ha argüido.
"Estamos con Israel contra el terrorismo y la violencia, pero si Israel continúa con su comportamiento, no me veré sometido al acuerdo de seguridad y cancelaré mi compromiso", ha alertado, al tiempo que se ha comprometido a "trabajar" con el próximo primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, "sin ceder en ninguno de los compromisos de larga data" en relación con los puntos exigidos por los palestinos para lograr un acuerdo de paz.
Por contra, ha tildado de "ilegal" la pertenencia de Israel a Naciones Unidas por su decisión de no aplicar las resoluciones 181 y 194, que partieron el Mandato de Palestina en dos estados y que recogen el derecho al retorno de la población palestina, respectivamente. Así, ha dicho que la adhesión de Israel al organismo estaba ligada a la aplicación de estas resoluciones.
Las tensiones han aumentado en los últimos meses en Cisjordania tras los últimos ataques contra israelíes, que han dejado más de 20 muertos desde el mes de marzo, incluido uno reclamado por el grupo yihadista Estado Islámico. Además, fuerzas israelíes han matado a más de 210 palestinos en lo que va de año, incluidos 160 en Cisjordania y Jerusalén Este y 52 en la Franja de Gaza.