BRUSELAS, 14 (EUROPA PRESS)
En rueda de prensa tras la cumbre celebrada en Bruselas, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, ha destacado que la reunión ha sido "histórica" al juntar por primera vez a los líderes europeos y del sudeste asiático en torno a la misma mesa tras 45 años de relaciones. En este sentido, ha insistido en la intención de desarrollar el potencial del vínculo para tener economías más prósperas y sostenibles, haciendo más fuerte la asociación entre la UE y la ASEAN.
El ex primer ministro belga ha expresado la voluntad de la UE de "aumentar el nivel de ambición" con los países de la ASEAN y ha puesto en valor la oferta de movilizar 10.000 millones de euros en infraestructuras en la región, unos fondos que servirán para conseguir resultados "tangibles" para la población del sudeste asiático.
Por su lado, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha puesto el foco en que haya más comercio entre ambas regiones, recalcando la aspiración a desarrollar más tratados de libre comercio con países de la zona, aparte de los existentes con Singapur y Vietnam. Todo con el "objetivo final" de retomar el impulso para negociar uno de región a región, que comenzó a debatirse en 2007 y se dejó morir por falta de interés político.
"El sueño es conseguir más pronto que tarde un acuerdo de bloque a bloque", ha apostillado Michel, mientras que desde el lado asiático el primer ministro camboyano y presidente de turno de la ASEAN, Hen Su, ha insistido en que "la política no debería impedir los acuerdos de libre comercio" y ha reivindicado que cualquier acuerdo futuro entre Europa y el Sudeste asiático debe firmarse "como socios en pie de igualdad".
CONDENA DE LA INVASIÓN RUSA DE UCRANIA
Las buenas palabras sobre reforzar el trato entre la UE y la ASEAN no se han visto empañadas por la falta de unanimidad de los países asiáticos para condenar de forma explícita la agresión rusa en Ucrania. La declaración conjunta de líderes europeos y asiáticos, en negociación hasta el último momento, no incluye el rechazo manifiesto a la invasión rusa y repite la fórmula empleada en la cumbre del G20 celebrada en Indonesia el mes pasado.
De esta forma, el texto conjunto recalca el compromiso de ambos bloques con el multilateralismo, el orden mundial basado en reglas y el respeto a la integridad y la soberanía de los países, y señala que la "mayoría" de los presentes en la reunión condenan enérgicamente la guerra en Ucrania.
Eso sí, recuerda que "hubo otros puntos de vista y diferentes evaluaciones sobre la situación y las sanciones contra Rusia". "Seguimos reafirmando, como para todas las naciones, la necesidad de respetar la soberanía, la independencia e integridad territorial de Ucrania", rezan las conclusiones, idénticas a las alcanzadas en la cumbre de Bali del G20.
A este respecto, el primer ministro camboyano ha insistido tras la cumbre en la posición de "respeto a la soberanía, la integridad territorial e independencia política" del bloque asiático y ha dicho que la ASEAN presenta objeciones a la "anexión y el uso de la fuerza contra un estado soberano". Pese a que la mayoría de los países de la ASEAN apoyaron la resolución de Naciones Unidas que denunció la agresión rusa en Ucrania, ni Laos ni Vietnam se sumaron y optaron por la abstención.
"Es verdad que en la ASEAN no todos los países tenemos la misma posición", ha reconocido el líder camboyano, quien no obstante ha puesto de relevancia la petición de la región para lograr un alto el fuego y pacificar el conflicto en el este de Europa. Los países del sudeste asiático reclaman el cese de las hostilidades en Ucrania, que se genere un entorno para solventar los problemas de manera pacífica, permitiendo el acceso humanitario a los civiles.
Sobre la tensión en el mar del Sur de la China por la cuestión de Taiwán y la creciente rivalidad entre Estados Unidos y China, las conclusiones de los líderes europeos y asiáticos señalan este mar como clave para el comercio mundial y destacan la importancia de mantener y promover la paz, la seguridad, la estabilidad, la seguridad y libertad de navegación y sobrevuelo en esta zona.
En cuanto al choque entre Pekín y Washington, el presidente filipino, Ferdinand Marcos, ha sido claro en rueda de prensa al destacar que los países de la región no quieren "volver a la Guerra Fría" y a un esquema en el que tengan que "elegir una superpotencia". "El futuro de la región del Indo-Pacífico debe resolverse por los países del Indo-Pacífico y no por países externos", ha declarado.